La variación anual de la inflación alcanza un nuevo máximo desde el 2013. Según el reporte preliminar del Eurostat, el índice de precios al consumidor subió a 2% anual en febrero desde 1.8% en enero. Este resultado se ubicó en línea con lo esperado. La inflación durante el mes de febrero estuvo definida, en buena medida, por un fuerte incremento de 9.2% anual en los precios de los energéticos, después de un avance de 8.1% el mes anterior. Este es el tercer mes desde junio de 2014 en que los precios de energéticos registran una variación anual positiva. Por su parte, los precios de los alimentos, bebidas y el tabaco avanzaron 2.5% desde 1.8% previo. Por otro lado, los servicios incrementaron ligeramente su ritmo de avance pasando de 1.2% anual a 1.3%. Finalmente, la inflación subyacente -que excluye alimentos y energéticos- se mantuvo en 0.9% a/a durante el mes de febrero. Cabe destacar que esta cifra se ubica aún lejos del objetivo del ECB de 2%.
La inflación anual supera el 2% en Alemania. Por países, los precios en Alemania mostraron un incremento anual de 2.2% desde 1.9% previo. Por su parte, la inflación en Francia mostró un menor ritmo de avance, pasando de 1.6% a/a en enero a 1.4% a/a. Mientras tanto, en España los precios crecieron 3% a/a en febrero desde 2.9% a/a en enero. Por último, en Italia, la comparación anual ha repuntado de manera importante en los últimos meses, pasando de terreno negativo en octubre a 1.6% a/a en febrero.
La inflación sigue fortaleciéndose de acuerdo a nuestra expectativa. Los precios mantuvieron avances mensuales promedio de 0.1% durante 2016, lo cual es muy superior al incremento mensual prácticamente nulo observado en 2015. Además de ello, resaltamos la importancia del avance del componente de energéticos, donde la comparación anual era de -8.7% en febrero y marzo de 2016 y ahora vemos ya tres meses consecutivos de avances positivos, con una fuerte variación de 9.2% en febrero de 2017.
Ahora será especialmente relevante observar si el alza en los precios de energéticos puede incidir sobre la inflación subyacente por medio de efectos de segunda vuelta, ya que hasta ahora la inflación subyacente se ubica abajo del 1% a/a. Estimamos que la variación anual del índice general podrá mantenerse ligeramente por encima del 1.5% en los próximos meses, para ceder a finales del año y ubicarse por arriba de 1% por temas de base de comparación. En este contexto, creemos que por ahora el ECB mantendrá una política monetaria acomodaticia que soporte tanto al frágil crecimiento económico como a la inflación, aunque lo cierto es que la presión aumenta dato a dato sobre el ECB para comenzar las pláticas sobre la posibilidad de un tapering (reducción en la compra de activos).