Las estadísticas macroeconómicas entrantes desde los Estados Unidos siguen indicando la relativa estabilidad de la economía. Sin embargo, la probabilidad de que la Reserva Federal aumente la tasa de interés clave se acerca a cero. Como comprenderán, esto no se debe al deterioro del estado de la mayor economía del mundo, sino al rápido deterioro de la situación en el Medio Oriente. Los inversores entienden, que es poco probable que los miembros del comité monetario del FOMC decidan otra subida de las tasas en condiciones de extrema incertidumbre.
Los inversores y los comerciantes también están entusiasmados, como lo demuestran el aumento de los rendimientos de los bonos del Tesoro estadounidense y de los precios del oro. El rendimiento de los bonos a 10 años se acerca a su nivel más alto desde 2007, el 5%. Teniendo en cuenta que la situación geopolítica en el mundo es mucho peor que en 2007 y que la inflación es varias veces superior al nivel objetivo, existe el riesgo de que las tasas se mantengan altas durante mucho tiempo.
Análisis técnico
A pesar de la importante agitación en los mercados financieros, la dinámica comercial en este par de divisas sigue siendo moderada. Las cotizaciones todavía se mantienen laterales entre 1.0500 y 1.0615, lo que indica incertidumbre en el mercado.
Dado que el dólar estadounidense actúa como un activo de refugio, un mayor deterioro de la situación en el Oriente Medio podría ejercer una presión adicional sobre el par. Una ruptura de la estrecha zona de soporte 1.0485-1.0500, abriendo el camino hacia 1.0300-1.0285, que es el escenario más probable en este momento.