Ayer, por primera vez en la historia, el bitcoin se situó por encima del nivel intradía de 50,000 dólares. Los entusiastas de las criptomonedas pronostican que, esta vez, la principal moneda digital por capitalización de mercado está justo al principio de su trayectoria ascendente.
En su opinión, esta vez es diferente de la última vez que el Bitcoin despegó, cuando alcanzó el nivel de 20,000 a finales de 2017, antes de caer en un invierno criptográfico de más de un año. Sin embargo, el argumento "ahora las cosas son diferentes" hace saltar nuestras alarmas bursátiles.
Para ser justos, el entorno actual ha cambiado principalmente de dos maneras:
1. El estado de la economía
2. Mayor aceptación de la clase de activos de las criptomonedas
Se espera que cantidades sin precedentes de estímulo, incluso en Estados Unidos, utilizados para contrarrestar la angustia económica mundial causada por la pandemia del coronavirus, desencadenen la inflación por primera vez en 12 años. Eso reduciría proporcionalmente el rendimiento del dólar, incentivando a los inversores y ahorradores a almacenar valor de alguna otra forma. En diciembre de 2017, cuando el bitcoin tocó techo, el índice dólar estaba en 94.00. Ahora está por debajo de 91.
Aún así, incluso hoy, cuando el dólar se disparó, el Bitcoin supera los 51,000 en el momento de redactar estas líneas, batiendo récords una vez más.
Además, sigue habiendo un gran debate en torno a la afirmación de que el bitcoin está robándole demanda de refugio seguro al oro. Pero los nuevos máximos históricos de la moneda digital —que ha registrado además máximos intradía— incluso en un momento en el que el metal precioso está cayendo bajo la fuerza del dólar, podría estar reforzando la teoría de que la criptomoneda, apodada “oro digital” por muchos está, al menos ahora mismo, usurpando el statu de refugio seguro del metal precioso.
A esto hay que añadir lo que parece ser una reevaluación general de los inversores de la nueva clase de activos. En 2017 muchos creían que el bitcoin era poco más que un truco, o la fantasía ingenua de los jóvenes soñadores que quieren reemplazar las monedas fiduciarias.
Ahora, las instituciones se están ablandando ante el bitcoin y la clase de activos de las criptomonedas. Durante septiembre de 2017, Ray Dalio, multimillonario fundador de Bridgewater Associates, el fondo de cobertura más grande del mundo, dijo que el bitcoin "no es una reserva efectiva de riqueza porque es demasiado volátil, a diferencia del oro".
Este año, sin embargo, el 30 de enero Dalio cambiaba sus declaraciones. "Admiro mucho cómo ha resistido el bitcoin la prueba del tiempo tras 10 años", dice, y añade:
"Me parece que el bitcoin ha logrado cruzar la línea que separa una idea altamente especulativa que bien podría no durar mucho de una que probablemente dure y probablemente tenga algún valor en el futuro”.
Para más defensa del Bitcoin, el 8 de febrero descubríamos que Tesla (NASDAQ:TSLA) había invertido 1,500 millones de dólares en la criptomoneda, y que la compañía planeaba aceptarlo como una forma de pago en el futuro. No es una gran sorpresa, sin duda, ya que el fundador y director ejecutivo del fabricante de vehículos eléctricos, Elon Musk, ha sido un defensor de la criptomoneda durante bastante tiempo.
Dalio sigue advirtiendo de que el bitcoin es extremadamente volátil y que los inversores podrían perder el 80% de su inversión si continúa la volatilidad. Incluso llegó a decir que los países de todo el mundo podrían prohibir la moneda digital si sigue subiendo.
Es irónico que, para los activos más antiguos y aceptados, los picos de mercado se alcanzan generalmente cuando intervienen los inversores minoristas. Sin embargo, para esta nueva clase de activos parecería que el pico podría acercarse cuando el “dinero inteligente” institucional entra en juego. Por lo tanto, emitiremos una advertencia de que el bitcoin está sobrepasado y parece que necesita repostar.
Aunque el precio del bitcoin ha ido subiendo, su impulso ha ido perdiendo fuelle, mostrando debilidad en la tendencia alcista, señal de un posible retroceso. Además, el RSI por encima de 70 indica que está sobrecomprado.
Estrategias de trading
Los traders conservadores deberían esperar un descenso significativo, al menos hasta 40,000 dólares, para probar la última línea de tendencia alcista desde los mínimos de diciembre, con evidencia de acumulación.
Los traders moderados comprarán bitcoin ante una acumulación tras una caída, o se arriesgarán a posicionarse en corto en caso de un regreso hasta el nivel de 40,000, sin signos de apoyo.
Los traders agresivos podrían posicionarse a contracorriente tras un contraataque bajista, con al menos una larga vela roja revirtiendo el avance del día anterior. Entonces, dependiendo de su tolerancia al riesgo, podrían esperar a que el precio vuelva a probar los máximos del día anterior para una mejor opción de entrada, si no para volver a probar la resistencia. O podrían posicionarse en corto inmediatamente. Cuanto más agresiva sea la posición, más ajustado debe ser el plan de trading.
Esto es lo que deberíamos tener en cuenta:
Estrategias de trading – Configuración de posición larga
- Entrada: 50,000 dólares
- Orden de minimización de pérdidas: 52,000 dólares
- Riesgo: 2,000 dólares
- Objetivo: 40,000 dólares
- Recompensa: 10,000 dólares
- Relación riesgo-recompensa: 1:5
Nota del autor: Este ejemplo no es una señal de cómo operar. Es sólo una estimación del aspecto que podría tener una reversión actual según nuestra interpretación del gráfico. El análisis real se encuentra en la sección Estrategias de trading. Incluso si acertamos, cualquier plan de trading puede fallar. Y podríamos estar equivocados. Por lo tanto, el trading sin un plan es como adentrarse en una selva peligrosa sin un mapa. Su tiempo, presupuesto y temperamento deben reflejarse en su plan. Practique con pequeñas cantidades, hasta que aprenda a desenvolverse.