Termina una semana en la que los mercados, por primera vez desde que ganara Donald Trump, han sentido el vértigo ante un presidente acosado por escándalos y cuya agenda económica se encuentra completamente empantanada. La luna de miel de Trump con los mercados empieza a dar síntomas de estar cerca de su fin. Pero de momento no hay mucho de qué preocuparse: pese al descalabro del miércoles (-1.8%), el saldo de la semana fue de un moderado descenso de 0.4% en el S&P’s 500 y el índice está a menos de un 1.0% de su récords. El otro protagonista de la semana fue Brasil, que sufrió ayer la peor jornada en los mercados financieros desde 2008. En medio del nerviosismo, se han beneficiado los activos seguros, los bonos del Tesoro de Estados Unidos, el oro, el yen o el bitcoin, que cerró hoy en un récord histórico de 1,935 dólares. El petróleo recuperó terreno y lleva ya dos semanas consecutivas de subidas (+3.5% l semana pasada y +5.3% esta semana) ante la expectativa de que la OPEP prolongue el recorte de producción anunciado a finales de noviembre del año pasado. Hoy el WTI reconquistó los 50 dólares. La semana que viene la OPEP se reunirá formalmente en Viena el jueves para ver si concretan esa medida o no.
La Semana en Estados Unidos: Trump visita Arabia, la OTAN y al G-7. PIB
Para lavar un poco su imagen, y luego de los escándalos domésticos, Donald Trump inició esta tarde su primer viaje internacional desde que tomó posesión. Estará en Arabia Saudí, Israel, Bélgica e Italia. Y una vez en Europa se dirigirá a las reuniones del G-7 y de la OTAN.
El sábado, en Arabia Saudí, Trump discutirá el tema de Irán, de la seguridad internacional y del terrorismo. Arabia Saudí, de orientación suní, tiene al régimen chií de Irán como su principal enemigo en Oriente Medio. Allí se celebran hoy elecciones presidenciales, las cuales enfrentan al actual presidente, Hassan Rohani, un clérigo moderado reformista, contra Ibrahim Rasi, un conservador radical. El puesto de presidente en Irán es el segundo más importante tras el de líder supremo. Además, Arabia Saudí e Irán tendrán que entenderse en la reunión de la OPEP del jueves 25 de mayo. Pese a la retórica antimusulmana de Trump, el Príncipe Heredero Sustituto saudí Mohámed bin Salmán lo considera un aliado luego de que endureciera las sanciones contra Irán y bombardeara al régimen de Bachar al Assad en Siria, un aliado de Irán.
El martes, ya en Roma, Trump se reunirá con el presidente de Italia Sergio Mattarella, el primer ministro Paolo Gentiloni, así como con el Papa Francisco en el Vaticano. El jueves acudirá a la cumbre de la OTAN en Bruselas. Pese a que el discurso de Trump se ha moderado respecto a sus aliados militares, exigirá que los miembros incrementen el gasto en defensa y aporten más recursos a la Alianza para repartir de manera más justa el costo de la seguridad mundial. En lo que respecta a los temas de seguridad, el terrorismo, Afganistán, la cercanía de Estados Unidos, pueden ser algunos asuntos centrales.
Desde Bruselas, se dirigirá a Sicilia para reunirse con los líderes del G-7, entre ellos la primera ministra británica Theresa May, la canciller alemana Ángela Merkel y el recién elegido presidente de Francia, Emmanuel Macron. Se prevé que Trump proponga ampliar el grupo a Rusia, país que ya pertenecía al G-7 pero que fue expulsado tras la anexión de Crimea, así como a China. El G-7 emitirá un comunicado oficial el sábado por la tarde. Así será la semana de Trump en su primer viaje oficial fuera de Estados Unidos, la cual dará mucho de qué hablar.
El martes será otra jornada crucial para los mercados en Estados Unidos. Ese día, la Casa Blanca publica su proyecto de presupuesto para el 2018. En su propuesta se incluye un plan para equilibrar el presupuesto federal en los próximos diez años gracias a fuertes recortes en los programas sociales y antipobreza como el de los vales de alimentos junto con su programa de recorte de impuestos, los cuales se prevé que aceleren el crecimiento e incrementen la recaudación tributaria. Eso sí, la Casa Blanca se resistirá a tocar los dos grandes programas sociales de Estados Unidos, el “medicare”, destinado a adultos mayores y discapacitados, y el “medicaid”, que atiende a individuos de escasos recursos. En consecuencia, los esfuerzos de ahorro se concentrarán en los programas de educación, vivienda, medioambiente o ayuda al exterior. En una propuesta inicial publicada en marzo, Trump propuso incrementar el gasto en defensa en 54,000 millones de dólares (mdd), o un 10%, que sería financiado con recortes de la misma cuantía en programas sociales. Pese a la importancia de la jornada, Trump ese día estará en Europa. Ayer, el secretario del Tesoro, Steven Mnuchin, expresó en el Senado su confianza de que el Congreso logre sacar este año la reforma tributaria.
En cuanto a los eventos económicos, el miércoles se publicarán las minutas de la última reunión de la Fed, que se celebró a inicios de mayo. La expectativa, pese a la duda de los mercados con las políticas de Trump, es que la Fed se incremente la tasa de los fondos federales en 25 pbs en la reunión del 14 de junio para dejar el nuevo rango entre 1.0% y 1.25%. Actualmente, la probabilidad implícita de los futuros de los fondos federales es de casi un 100% a favor de un aumento de tasas el 14 de junio.
En los datos económicos, el más relevante se publica el viernes. Se trata del reporte preliminar del PIB para el primer trimestre (o primera revisión). En el reporte avanzado, el PIB se expandió un 0.7% ante la debilidad del gasto de consumo. Sin embargo, se espera que esa abrupta desaceleración sea un asunto temporal y que la economía recupere fuerza en el segundo trimestre. El consenso prevé que el PIB se revise ligeramente al alza de la lectura de 0.7% a otra de 0.9%. Los otros indicadores económicos importantes de la semana serán los ventas de casas, tanto nuevas como existentes, y los pedidos de bienes duraderos.
La semana en México: Inflación, PIB, desempleo y sector externo
La semana pasada, Banxico subió la tasa de referencia, de manera bastante sorpresiva, en 25 pbs para situarla en 6.75%. La razón: el hecho de que la inflación haya sorprendido al alza, prosiga su tendencia de aumentos y amenace con provocar efectos de segunda ronda y contamine a las expectativas futuras de precios.
Esta semana tendremos un nuevo indicador de inflación, para la primera quincena de mayo. El consenso prevé que para la primera quincena, los precios se reduzcan un 0.38% tras incrementarse un 0.27% en la segunda quincena de abril. Esa reducción se debe a los subsidios de verano en algunas ciudades. En la primera quincena de mayo de 2016, la caída fue más pronunciada, de 0.48%. En consecuencia, la tasa anual de la inflación general seguiría presionándose: para la primera quincena se estima en 6.10% comparado con 6.01% en la segunda de mayo, considerablemente por encima de la cota superior de 4.0% del rango objetivo de Banxico. Respecto a la subyacente, el consenso estima un incremento de 0.13%, lo que supondría una aceleración respecto a la tasa observada en la segunda quincena de mayo (+0.08%) o en la primera quincena de mayo de 2016 (+0.08%). La tasa anual de la subyacente, que se desaceleró de 4.73% en la primera quincena de abril a 4.68% en la segunda, podría repuntar a 4.73% en los primeros quince días de mayo.
Más allá de la inflación, habrá muchos indicadores relevantes en relación a la actividad real. El lunes se publicará el Igae para marzo y con él el dato definitivo del PIB para el primer trimestre. En el reporte oportuno, el PIB sorprendió en el primer trimestre con una expansión anual de 2.7% en su serie original, por encima de lo esperado por el consenso (2.5%). En el reporte del lunes, se espera que se confirme ese número de 2.7%. Durante el primer trimestre del año, la economía mexicana se vio beneficiada por un mayor número de días laborales (la Semana Santa en 2016 fue en marzo, y este año fue en abril), lo que más que contrarrestó el hecho de que 2016 fuera bisiesto. En consecuencia, el segundo trimestre contará con menos días laborales por el efecto de la Semana Santa, lo que implicará una sustancial desaceleración de la tasa anual en su serie original.
Sin embargo, más allá de esos efectos de calendario, la realidad es que pese a todos los efectos negativos que impactó a la economía mexicana en el primer trimestre (Trump, “gasolinazo”, inflación, depreciación del peso, caída de la confianza, etc) la economía mexicana resistió muy bien. En su serie ajustada por estacionalidad, el PIB se expandió un 0.6% en el primer trimestre respecto al cuarto trimestre del año pasado. Por tanto, la economía sostuvo el ritmo de expansión observado al final del año pasado, cuando aumentó un 0.7%.
El martes se publicarán las ventas al por menor para el mes de marzo, las cuales pierden algo de interés una vez que ya se conoce el Igae y el PIB. El consenso prevé que las ventas aumenten a una tasa anual de 5.0% comparado con 3.6% en febrero. Pese a que el PIB ha resistido bien, el gasto de consumo se ha desacelerado de manera abrupta si tenemos en cuenta que a finales del año pasado crecía a tasas superiores al 8.0%. El viernes, asimismo, se publicará la tasa de desempleo para el mes de abril. La tasa de desempleo, en su serie ajustada por estacionalidad, podría descender a 3.5% comparado con 3.53% en marzo. En su comunicado de política monetaria, Banxico advirtió que la holgura en el mercado laboral se podría haber agotado. En su serie original, el consenso estima una tasa de 3.387% en abril, por encima de 3.19% en marzo.
El jueves, finalmente, tendremos dos datos referentes al sector externo, el gran tema de debate con Estados Unidos. En abril, el déficit comercial podría ampliarse a 1,794 millones de dólares, comparado 182.90 mdd en marzo. El número, sin embargo, es ligeramente mejor al observado en abril de 2016 (-2,080 mdd). Finalmente, la cuenta corriente de México podría presentar un déficit de 6,457 mdd. Aquí sí, el deterioro es muy notable en relación al observado en el trimestre previo (-3,363 mdd) aunque algo mejor al registrado en el primer trimestre de 2016 (-8,880 mdd).
En otros vénetos, el martes se publicará la encuesta de Citibanamex, donde se pueden registrar revisiones al alza sobre todo en la inflación así como en el nivel de la tasa de referencia para el final de año. Ese mismo día, se celebrará en México la conferencia de Ciudades de Latinoamérica, en la que participarán el Secretario de Relaciones Exteriores, Luis Videgaray, y el Secretario de Hacienda, José Antonio Meade.
Resto del mundo: Temer en al cuerda floja. Reunión de la OPEP
Brasil seguirá en el ojo del huracán. Las recientes confesiones de grandes empresarios en contra del presidente de Brasil, Michel Temer, a quien se le acusa de millonarios cobros de comisiones ilegales (al igual que Lula y Dilma Rousseff) y el veredicto de la fiscalía de que el actual presidente está realizando maniobras para obstruir a la justicia. Aparentemente, Temer aprobó la entrega de dinero a Eduardo Cunha, el vocero del congreso que alentó el proceso de “impeachment” contra Dilma Ropusseff y que ahora se encuentra en prisión para comprar su silencio. La posibilidad de que Temer salga de la presidencia es lo que provocó el colapso de los mercados el jueves: se teme que su plan de austeridad y su programa para sacar a la economía de Brasil de su peor recesión de la historia moderna no se pueda materializar ante la ausencia de estabilidad política.
El jueves habrá reunión formal de la OPEP en Viena. En ella también tendrán que entrar en contacto con miembros externos a la OPEP que se podrían unir a la decisión de la OPEP. El tema a tratar es si la OPEP, junto con otros miembros externos como Rusia, debe prorrogar el recorte de la producción anunciado en noviembre del año pasado, y en caso de extenderlo, hasta cuándo. La expectativa de que la OPEP prorrogue el recorte en la producción con el fin de reducir los niveles de inventarios. Sin embargo, los stocks no han descendido tanto como se esperaba al haber aprovechado Estados Unidos el aumento del precio del barril para incrementar su producción.
En Europa, el miércoles el BCE publica su reporte de Estabilidad Financiera. Ese mismo día, jura Lenin Moreno como nuevo presidente de Ecuador en una ceremonia en Quito en un contexto de recesión económica, bajos precios del petróleo y una nación dividida. También la semana que viene, el NOOA publica su pronóstico para la temporada de huracanes.