Análisis realizado al cierre del mercado estadounidense por Kathy Lien, directora general de Estrategia FX en BK Asset Management.
Entre el voto a favor del proyecto de ley fiscal del Senado y la confusión con el tema de Flynn-Trump-Rusia, el dólar debería haber subido considerablemente. En cambio, el billete verde no pudo ampliar sus ganancias durante la jornada de negociación en Nueva York del lunes aunque logró cerrar la sesión en territorio positivo con respecto a las demás monedas principales. La falta de continuación durante la jornada en Estados Unidos es señal de la presión de venta que rodea al billete verde. Las acciones de Estados Unidos registraron máximos históricos el lunes y el rendimiento de los bonos del Tesoro a 10 años aumentó.
Pero el USD/JPY y el índice dólar se dieron de bruces contra el nivel de resistencia clave, no fue suficiente impulso para mantener el USD/JPY por encima de 113 y llevar el índice dólar hasta 93,50. Este revés no ha tenido nada que ver con los datos pues los pedidos industriales han superado las expectativas.
A los inversores les sigue preocupando que la reforma fiscal sea un proceso prolongado, el siguiente paso es la conciliación de las leyes de la Cámara de Representantes y el Senado y aunque hay enormes diferencias, los líderes de ambas cámaras están muy motivados para llegar a un acuerdo, así que creemos que es sólo cuestión de tiempo antes de que se consiga una propuesta final y pase a la Casa Blanca para la firma del presidente Trump. Es por ello que creemos que las reversiones del dólar serán superficiales. El evento de riesgo más importante para el dólar esta semana será el informe de empleo no agrícola del viernes.
A sólo siete días laborables de la reunión del FOMC de diciembre, este informe podría tener un impacto importante en las expectativas del mercado. Se espera que se haya producido un aumento de 200.000 empleos, pero la remuneración media por horas y la tasa de desempleo debería determinar la reacción del dólar y las expectativas del mercado en cuanto al futuro rumbo de la Fed. Mientras tanto, si el USD/JPY cae hasta 112, podría ser un lugar interesante para restablecer posiciones largas.
La primera ministra May del Reino Unido se reunió con el presidente de la Comisión Europea Juncker, así que no fue ninguna sorpresa observar los vaivenes de la libra el lunes. ElGBP/USD se disparó hasta máximos de 1,3539 al comienzo de la jornada de negociación de Nueva York pero perdió más de 100 pips en cuestión de minutos después de que la BBC revelara que no se había llegado a ningún acuerdo.
May debía presentar una oferta mejorada a Juncker con la esperanza de avanzar en las negociaciones Brexit hasta la siguiente fase, pero no pudo cerrar el acuerdo debido a una brecha de última hora en la cuestión de la frontera irlandesa. May tuvo que recular después de que el líder del primer partido político de Irlanda del Norte dijera que "Irlanda del Norte debe abandonar la Unión Europea en las mismas condiciones que el resto del Reino Unido.
No vamos a aceptar ningún tipo de reglamentación diferente que separe a Irlanda del Norte políticamente o económicamente del resto del Reino Unido" Tanto Juncker como May describieron las conversaciones como constructivas aunque este contratiempo ha sido difícil de superar. Mientras las negociaciones continúan esta semana, los inversores siguen siendo optimistas acerca de que pueda alcanzarse todavía un acuerdo.
May y Juncker pretenden volver a reunirse antes de acabar la semana. Si el PMI del sector servicios del martes y el índice compuesto del Reino Unido muestran las mismas mejoras que hemos visto en los sectores manufacturero y de la construcción, el GBP/USD podría volver a situarse en 1,35.
En cambio, ha sido una jornada tranquila para el euro, que se ha mantenido en un rango relativamente estrecho de 55 pips frente al dólar. La moneda única se vio respaldada por el margen de rendimiento entre los bonos de Alemania y de Estados Unidos, que se inclinó a favor del EUR/USD a pesar de la subida de las tasas de Estados Unidos. Los datos siguen siendo robustos; los precios de la producción de la eurozona han subido más de lo esperado en octubre.
Por desgracia, no se espera que el informe de las ventas minoristas de la zona euro del martes sea tan favorable para la divisa pues el pronunciado descenso del consumo de Alemania ha lastrado el índice de la región. No ha habido ningún progreso en las conversaciones de coalición de Merkel así que, provisionalmente en esta semana repleta de datos de Estados Unidos, el rumbo del euro será probablemente determinado por el interés del mercado por el dólar.
El dólar australiano se movió durante la noche del lunes a la espera de los datos sobre la actividad del sector servicios, las ventas minoristas y el anuncio de política monetaria del Banco de la Reserva de Australia. Creemos que los datos serán ligeramente más fuertes y la orientación política se mantendrá inalterada pero que eso no ayudará mucho a la divisa.
Si echamos un vistazo a la evolución de la economía de Australia desde la última reunión, lo primero y principal es que se han publicado menos informes económicos de lo habitual entre anuncios de política monetaria. Los datos sobre ventas minoristas, la balanza comercial y el PIB del 3T, por ejemplo, no se publican hasta el mismo día o el día siguiente de la decisión sobre los tipos del Banco de la Reserva de Australia.
Desde la reunión de noviembre, la confianza de los consumidores ha disminuido, las expectativas de inflación han descendido y la actividad del sector inmobiliario se ha ralentizado. Los indicadores del mercado laboral han sido dispares pero en general el Banco de la Reserva de Australia está satisfecho con el mercado laboral. La confianza empresarial y la actividad del sector manufacturero también mejoraron al dispararse aún más los precios del mineral de hierro.
Estas mejoras animarán al Banco de la Reserva de Australia a mantener su postura política neutral manteniendo su opinión acerca de que la inflación se mantendrá en niveles bajos durante algún tiempo. No creemos que el banco central aporte nada nuevo, de manera que podría limitarse el impacto sobre el AUD. El par AUD/USD sigue en una tendencia bajista pero no creemos que el anuncio de Banco de la Reserva de Australia consiga sacar el par de su rango de entre 0,7532 y 0,7660; el catalizador serán los datos de Australia (ventas minoristas y PIB) o los datos de Estados Unidos.
Los dólares australiano, el canadiense y el neozelandés han perdido posiciones, con el NZD a la cabeza del descenso. Nueva Zelanda no ha publicado informes económicos de relevancia pero a los inversores les preocupa que la subasta de productos lácteos del martes podría indicar otro descenso que augura problemas no sólo para los productores de lácteos del país sino para el Banco de la Reserva de Nueva Zelanda y el dólar neozelandés.
A pesar de los robustos datos de Canadá de la semana pasada y la subida del lunes del rendimiento de los bonos canadienses, la divisa de la nación no pudo ampliar su descenso al recuperarse el dólar de EE.UU. y descender los precios del petróleo un 1,5%. Creemos que se observará aún más debilitamiento antes del anuncio de política monetaria del Banco de Canadá del miércoles pero el mejor momento para vender puede estar más cerca del nivel de 1,2750.