Retroceso de la confianza del consumidor en noviembre. De acuerdo al reporte publicado hoy por Banxico e INEGI, la confianza del consumidor se ubicó en 85.7 puntos, por encima de nuestro pronóstico de 82.5 puntos (consenso: 84.4 puntos). Ello implicó una reducción de 7.8% anual, y con la cifra de hoy suma diez meses consecutivos en contracción. Con cifras ajustadas por estacionalidad, la confianza del consumidor registró una reducción de 0.1% m/m.
Al interior, las expectativas de los consumidores en torno al desempeño económico futuro de los hogares y del país presentaron un incremento de 1.7% y 0.5% m/m, respectivamente, el cual probablemente estuvo explicado por el anuncio del incremento de 9.8% en el salario mínimo. No obstante, las perspectivas respecto a la situación económica presente del país registraron una caída de 0.4% m/m. Finalmente, el componente que hace referencia a la posibilidad de adquirir bienes duraderos se contrajo 0.7% m/m como resultado de la trayectoria ascendente que ha mantenido la inflación en los últimos meses.
Consideramos que el retroceso en la confianza del consumidor durante diciembre se explicó por la incertidumbre respecto al dinamismo económico de México generada por el resultado electoral en EE.UU. y la consecuente depreciación de la divisa mexicana. En el primer caso, y a pesar del incremento en el salario mínimo, es probable que los consumidores estén considerando un panorama económico más pesimista tras las políticas económicas que podrá implementar Donald Trump. En el segundo caso, los consumidores mexicanos probablemente estén descontando una mayor inflación derivado de la fuerte depreciación que ha registrado la divisa mexicana tras los resultados electorales en EE.UU.
Mayores expectativas inflacionarias hacia delante. INEGI también publicó la serie extendida de los índices complementarios de confianza del consumidor. Si bien éstos no se incluyen en la ponderación final del índice general, si proveen información relevante sobre la perspectiva de los consumidores en torno a otros indicadores económicos.
Dentro de los 10 índices complementarios, destacamos el incremento que han presentado las expectativas inflacionarias de los consumidores en los últimos meses. En el caso de dicho índice, una caída sugiere que los consumidores esperan una mayor inflación durante los próximos 12 meses. Analizando la serie histórica –y adelantando las expectativas inflacionarias 12 meses para que sean coincidentes con la inflación actual–, se puede apreciar claramente que los consumidores esperan una mayor inflación al cierre del 2017.
Esperamos un fuerte retroceso en la confianza del consumidor de enero. Consideramos que la confianza del consumidor registrará una marcada disminución en la encuesta de enero derivado del incremento en los precios de las gasolinas. Si bien la SHCP dio a conocer este anuncio el 27 de diciembre la encuesta del último mes del año no incorporó este efecto, ya que la encuesta de confianza se levanta durante las tres primeras semanas de cada mes. Sin embargo, es muy probable que la encuesta de enero si incorpore dicho efecto.
Hacia delante estimamos que la confianza del consumidor mantendrá una trayectoria descendente en los siguientes reportes derivado los siguientes factores: (1) La incertidumbre en torno a las políticas económicas que implementará Donald Trump el próximo año y el impacto sobre las decisiones de consumo e inversión de los hogares mexicanos; y (2) mayores niveles de inflación generados por el mayor traspaso de la depreciación del tipo de cambio a precios y por el incremento en el salario mínimo y en los precios de la gasolina.