El cierre del blanqueo de capitales por USD 116.800 millones (de los cuales unos USD 23.500 millones ingresaron al país), sumado al vencimiento del BONAR X el próximo lunes por casi USD 7.000 millones, han presionado a la baja los rendimientos de los bonos nacionales en las últimas dos semanas. Esto demuestra que gran parte de esos dólares se han posicionado en renta fija local.
Títulos como el DICA ha achicado su tasa interna de retorno en 45 puntos básicos solamente en lo que va de abril, lo cual implica un alza en la cotización del orden del 3.8% en igual período.
El Gobierno captó parte de ese flujo con dos licitaciones: Letras del Tesoro y dos bonos en dólares a 8 años (vto 2025) y 20 años (vto 2037), adjudicando en total unos USD 4.275 millones entre ambas colocaciones.
Letras del Tesoro:
Cómo hace dos semanas, la nueva licitación de LETES dio una nueva oportunidad al público inversor de posicionarse en dólares y aprovechar las bajas del tipo de cambio en los últimos días, accediendo a la divisa al tipo de cambio de la comunicación A3500 del Banco Central, que al 10/04 fue de 15,3293. Nuevamente, por exceso de demanda por este tipo de instrumentos, se realizó un prorrateo. Las órdenes alcanzaron los USD 6.191 millones (monto cercano al vencimiento del BONAR X), mientras que el monto adjudicado fue de USD 2.500 millones de Valor Nominal.
Los tramos de las LETES fueron los siguientes:
Bonos en dólares a 2025 y 2037:
Se suman dos nuevos títulos a la curva de soberanos en dólares: el BONAR 2025 y BONAR 2037. De esta forma, esta curva alcanza unos 17 títulos cotizando en el mercado local.
El BONAR 2025 tendrá vencimiento el 18 de abril de 2025 (8 años): Realizará dos pagos al año con un cupón del 5.75%, los días 18 de abril y 18 de octubre de cada año. La devolución del capital la realizará en 3 pagos: los dos primeros del 33% (el 18 de abril de 2023 y 2024), y el último, del 34% (al vencimiento).
El BONAR 2037 vencerá el 18 de abril de 2037 (20 años), pagando un cupón del 7.625% anual, también en dos pagos anuales, y amortizando en 3 pagos: dos de 33% (en 2035 y 2037) y el restante 34% al vencimiento.
Ambos títulos estarán regidos bajo legislación local.
El monto licitado fue algo más acotado que en LETEs, ya que, si bien el Gobierno buscaba colocar hasta USD 3.500 millones entre las dos licitaciones, el mercado demandó un total de USD 1.775 millones (USD 888 millones a 2025 y USD 887 millones a 2037). En definitiva, el grueso de los flujos se inclinó más hacia las Letras.
Analizando la curva, podemos ver como quedaron posicionados los nuevos títulos: El BONAR 2025 aparece con una duration modificada de 5.71, y una TIR del 5.83% (según referencia del precio de licitación). El spread vs la referencia algo más corta (entre 3 y 4 de DM) es de unos 120 puntos básicos. Por ejemplo, pasar del AY24 al BONAR 2025, implica asumir un riesgo adicional de 1 punto de DM, para tener una TIR 1.27% superior.
Ya el BONAR 2037, posicionado sobre el tramo más largo de la curva, con una DM de 9.97 y una TIR del orden del 7.75% no luce tan atractivo contra el DICA (con solo 56 puntos básicos de spread) y un riesgo adicional por DM de 2.5. Esto se da por el aplanamiento que muestra la curva entre el tramo medio (AA26, A2E7 y DICA) y el largo (BONAR ’37, PARA y AA46).
Un punto en contra para estos títulos es que, a pesar de que aún no están cotizando, probablemente carezcan de demasiada liquidez, ya que los montos emitidos son relativamente bajos respecto a otros títulos de la curva.
En conclusión, tanto el BONAR 2025 como el BONAR 2037 ofrecen la posibilidad de posicionarse dentro de la parte más corta del tramo medio y largo respectivamente, pero el BONAR 2025 aparece con mayor atractivo para aquellos que busquen alargar DM desde tramo corto (AO20, A2E2, AY24, AA21) hacia tramo medio. No así el BONAR 2037, ya que entre el tramo medio y largo la curva se encuentra con una pendiente mas aplanada.