Peso mexicano se contagia del sentimiento negativo en los mercados financieros globales, y por momentos de la madrugada se presiona hacia $20.25 spot. En la sesión de hoy, la subida de los precios de energéticos (petróleo, gas, carbón), junto con los problemas en las cadenas de suministro y el hecho de que el invierno esté muy cerca, genera preocupación entre los operadores, especialmente por su impacto en la recuperación económica, así como que la alta inflación pueda no ser tan temporal como vienen defendiendo los bancos centrales y que pueda además condicionar las políticas monetarias, forzando a los bancos centrales a retirar sus estímulos antes de lo previsto.
Por lo pronto, estas preocupaciones se focalizan en Europa y China, donde la expectativa es que afronten un invierno con posible escasez de fuentes energéticas, pero con riesgo de que se convierta en un asunto global. Tampoco le ayuda a la moneda mexicana el alza en las tasas de los bonos del tesoro estadounidense, en particular el de 10 años se ubica en su nivel más alto en tres meses (1.55%), al descontar los inversionistas el comienzo del 'tapering' de la FED en el mes de noviembre. Esta situación provoca reacomodo de portafolios de inversión, favoreciendo las opciones de activos más seguros.
Por su parte, el presidente de la FED Jerome Powell, comparece hoy ante el Comité Bancario del Senado para explicar la marcha de la economía (9am). Su discurso ya se ha publicado y el funcionario ha comentado que la inflación es elevada y probablemente lo seguirá siendo en los próximos meses antes de moderarse. No obstante, ha reconocido que a medida que continúe la reapertura, los cuellos de botella, las dificultades de contratación y otras limitaciones podrían volver a ser mayores y más duraderos de lo previsto, lo que presenta riesgos al alza para la inflación.
Otro asunto de interés ha sido la renuncia de dos presidentes regionales de la FFED (Robert Kaplan y Eric Rosengren), que se han visto envueltos en una gran polémica por haber realizado trading con acciones de empresas americanas antes de las decisiones sobre política monetaria del banco central. La atención se enfoca en quién los sustituirá, en gran parte porque son dos funcionarios con marcado sesgo hawkish sobre la política monetaria estadounidense. Por último, los republicanos del Senado bloquearon ayer lunes un proyecto de ley que financiaría el gobierno y suspendería el techo de la deuda de Estados Unidos. Los legisladores deben aprobar la financiación del gobierno antes del viernes para evitar un cierre parcial de oficinas. Así, por el resto del día, el tipo de cambio podría fluctuar entre los $20.10 y $20.30 spot (el euro entre los $1.165 y $1.172).
Las principales bolsas en el mundo operan con caídas generalizadas, dominada por los temores existentes sobre el suministro de gas, petróleo, carbón y chips, mientras los operadores intentan adelantarse a las recientes decisiones más restrictivas de bancos centrales.
El fuerte incremento que ha experimentado el precio de algunas materias primas, en particular las energéticas en las últimas semanas, que le ha llevado a situarse en su nivel más elevado en varios meses, hace temer a los inversionistas que la alta inflación pueda no ser tan temporal como vienen defendiendo los bancos centrales y que pueda terminar afectando a la recuperación económica directamente, además de condicionar más de lo esperado las políticas monetarias, forzando a los bancos centrales a retirar sus estímulos antes de lo que sería deseable.
La situación parece más complicada en Europa y Asia, donde la expectativa es que afrontarán un invierno con posible escasez de fuentes energéticas. Si el impulso en el precio de energéticos se mantiene, aumentará la presión sobre la OPEP+ para que acelere el ritmo de incremento de la producción, tras un recorte histórico de la misma a principios de la pandemia. Los planes de aumentar la producción en 400 mil barriles diarios cada mes harán que la producción vuelva a la normalidad a finales del próximo año, pero los últimos acontecimientos pueden obligar al grupo a acelerar el ritmo.
En este sentido, China se enfrenta a otro choque de crecimiento en forma de restricciones sobre la energía, una restricción relativamente nueva, pero cada vez más estricta, por la creciente presión regulatoria para cumplir con los objetivos ambientales para el consumo de energía y la intensidad energética. El presidente chino, Xi Jinping, anunció en septiembre del año pasado que China pretende alcanzar el pico de emisiones de carbono en 2030 y ser neutral en 2060. Esto puso en marcha planes nacionales y locales para reducir la producción de carbón y otros procesos con alto contenido de carbono. Esto se suma a otros riesgos económicos para China, como la ralentización de las ventas inmobiliarias y de la actividad de la construcción a raíz de la crisis de deuda que sufre el gigante inmobiliario Evergrande. Así, varias firmas han recortado el PIB de China. Goldman Sachs (NYSE:GS) lo ha reducido hasta el 7.8% desde el 8.2%. Nomura espera que crezca un 7.7% este año, frente a la previsión anterior del 8.2%.
Jerome Powell comparece hoy ante el comité bancario del Senado (junto con la secretaria del Tesoro Janet Yellen), y defenderá que el repunte de los precios es temporal y consecuencia de cuellos de botella en las cadenas de suministro, así como de los retos que conlleva la reapertura de las economías, en un discurso que ya ha sido publicado por el organismo monetario. Powell también comentará la trayectoria de la economía sigue dependiendo del curso del virus y persisten los riesgos para las perspectivas.
Otro asunto de interés ha sido la renuncia de dos presidentes regionales de la FED (Robert Kaplan y Eric Rosengren), que se han visto envueltos en una gran polémica por haber realizado trading con acciones de empresas americanas antes de las decisiones sobre política monetaria del banco central. Lo ocurrido pone en juego un número inesperado de puestos de alto nivel en la política monetaria, y anticipa que seguramente se generará una atención "inusualmente intensa" sobre quién los ocupará.
Además, los inversionistas siguen pendientes de las negociaciones presupuestarias en Washington para alcanzar un acuerdo sobre el programa de infraestructuras de la Administración Biden y la financiación del Gobierno federal. El Congreso estadounidense está agotando el tiempo para evitar el cierre del Gobierno y un impago de la deuda. Los republicanos del Senado bloquearon el lunes un proyecto de ley que financiaría el gobierno y suspendería el techo de la deuda de Estados Unidos, dejando a los demócratas solos para evitar una posible calamidad económica. Los legisladores deben aprobar la financiación del gobierno antes del viernes para evitar un cierre parcial.
En México, la tasa de desempleo se ubicó en 4.3% en agosto con cifras originales, ligeramente por debajo del 4.4% esperado y del mes anterior. Con datos desestacionalizados se ubicó en 4.05%.