Ayer fue un día de locura. Asustados por las consecuencias de una guerra comercial en China, los mercados abrieron con fuertes descensos. Sin embargo, la jornada terminó con sólidos avances conforme dichos temores se desvanecieron. Ya sabemos cómo es la manera de Donald Trump de negociar: primero tira la piedra y luego esconde la mano. El nuevo asesor económico de Trump en la Casa Blanca advirtió que posiblemente los aranceles impuestos sobre China pueden no entrar en vigor y aseguró que la reacción del mercado hasta ahora a los temores de una guerra arancelaria ha sido “suave”. Al parecer, todo no es más que una táctica para negociar con China en medio del caos, algo así como ha venido haciendo con casi todo, también con la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte.
De modo que el rebote de ayer de Wall Street fue espectacular. Por ejemplo, el Dow Jones recuperó a lo largo de la jornada 700 pts. .Al inicio de la sesión llegó a caer un 2.1%, y sin embargo cerró con una ganancia de casi el 1.0%. Y hoy todo apunta a que el rally continuará. Al menos así lo sugieren los futuros de Wall Street: en el momento de escribir esta nota, los futuros del S&P’s 500 avanzan 104.8 pts y ajustados por “fair value” ganan 14.9 pts mientras que los del Nasdaq 100 ascienden 61 pts y ajustados por “fair value” se elevan 72 pts. Los futuros del Dow Jones se incrementan 95.0 pts.
El buen ánimo del mercado se observa en todos los rincones del planeta. En Europa, el Dax de Fráncfort trepa un 2.3%, el Cac-40 de París un 1.9% y el Ibex-35 de Madrid otro 1.9%. En Asia, el Nikkei se elevó un 1.53%. Allí, los mercados de China y Hong Kong estuvieron hoy cerrados.
Pero en general, el mensaje que lanza hoy Estados Unidos es que después de las amenazas sobre los diferentes aranceles que estaban contemplando y las represalias adoptadas por China es hora de sentarse a hablar respecto a un comercio más justo en medio de una escalada de tensiones con el objeto de calmar a los inversionistas, algo que a juzgar por la respuesta de los mercados, se ha logrado.
En los indicadores económicos, el principal dato publicado hoy es, precisamente, la balanza comercial para el mes de febrero. El déficit fue de 57,600 millones de dólares (mdd), peor que los 56,800 mdd esperado por el consenso, y que el déficit de 56,700 mdd registrado en enero. De modo que la estrategia de Trump no está funcionando: el déficit de febrero es el más alto en nueve años derivado de la fortaleza de la demanda estadounidense, la depreciación del dólar y el alza de algunos productos como resultado de las amenazas arancelarias, sobre todo materias primas, lo que ha impulsado las importaciones. De hecho, el déficit comercial se ha deteriorado por sexto mes consecutivo, la peor racha desde el año 2000. Tanto las importaciones como las exportaciones se incrementaron en un 1.7%. Si lo vemos por países, el déficit se estrechó con China, al reducirse de 35,500 mdd en enero a 34,7400 mdd en febrero. Pero se amplió con México de 5,600 mdd a 6,600 mdd, así como con Europa, al pasar de 15,000 mdd a 15,300 mdd. El deterioro del déficit comercial restará crecimiento a la economía estadounidense durante el primer trimestre del año.
Por otro lado, hoy se publicaron las solicitudes de subsidios de desempleo, las cuales inesperadamente se incrementaron en 24,000 en la semana terminada el 31 de marzo para ubicarse en 242,000, muy por encima de las estimaciones del mercado (225,000). El dato de la semana anterior además se revisó al alza en 3,000 para situarse en 218,000. El nivel registrado la semana pasada es el más alto en tres meses. Sin embargo, el dato pudo estar distorsionado por el feriado de la Semana Santa.
Mañana se publica el reporte de empleo en Estados Unidos, el dato de mayor impacto potencial para los mercados. El consenso prevé que la nómina se incremente en 185,000 trabajadores en marzo tras aumentar en 313,000 en el mes previo, en tanto la tasa de desempleo podría reducirse en una décima, de 4.1% a 4.0%, lo que sería el nivel más bajo desde el año 2000. Pero el mercado sobre todo estará pendiente de las remuneraciones por hora: en términos mensuales podría elevarse en un 0.3%, lo que significaría que la tasa anual se acelerara de 2.6% a 2.7%.
El índice del dólar spot de Bloomberg gana hoy un 0.3%. El peso mexicano cotiza plano contra el dólar en 18.10 pesos, en tanto el euro se deprecia un 0.2% a 1.225 dólares y la libra esterlina un 0.4% a 1.402 dólares. El real brasileño se fortalece un 0.7%. En el mercado de deuda, la tasa de 10 años de Estados Unidos se eleva 1 pb a 2.82% al disminuir la aversión al riesgo. En las materias primas, el oro cae un 0.9% a 1,3238 dólares la onza, y la plata un 0.4% a 16.198 dólares. Por el contrario, el barril de crudio de WTI cotiza casi sin cambios en 63.29 dólares, en tanto el cobre gana un 1.4% y el aluminio un 0.7%.
Por tanto, tras los miedos a una guerra comercial, ha regresado algo de calma al parqué. La razón es la de siempre: después de que Trump generara gran nerviosismo con su política arancelaria, ahora dicen que tranquilos, que sólo es su manera de negociar, pero que mirarán la política con cuidado para no hacer descarrilar a la economía ni tampoco provocar un desplome de los mercados.