- Producción industrial (enero): 1.1% anual; Banorte-Ixe: -0.6%; consenso: 0.1% (rango de estimados: -1.2% a 1%); anterior: 0%
- El mayor dinamismo al esperado de la actividad industrial durante enero se explicó por el incremento de 4.6% en la construcción y por la menor caída a la esperada de 2.5% en la producción minera
- Por su parte, el sector manufacturero registró un moderado avance de 1% anual
- Con cifras ajustadas por estacionalidad, la producción industrial se incrementó 1.2% m/m
- Hacia delante, continuamos esperando una recuperación marginal de la actividad industrial
Mayor crecimiento al esperado explicado por el avance de la construcción. De acuerdo al reporte publicado hoy por el INEGI, la producción industrial presentó un crecimiento de 1.1% anual, por encima de nuestro pronóstico de una contracción de 0.6% (consenso: +0.1%). El mayor avance al esperado de la actividad industrial se explicó parcialmente por el incremento de 4.6% anual en la construcción, por la menor reducción de la industria minera (-2.5% anual) y por el moderado crecimiento de 1% que presentó la producción manufacturera.
En el primer caso, el crecimiento de la construcción se generó por el incremento de 6.1% en la edificación. Sin embargo, la construcción de obras de ingeniería civil mostró un bajo crecimiento de 1.7% derivado de la reducción en la inversión pública ante la restricción presupuestaria anunciada por el gobierno federal y aprobada en la Ley de Ingresos de la Federación 2016. En el segundo caso, la producción minera se redujo 2.5%, dada la caída en la plataforma de producción petrolera. Con ello, el sector minero suma veintidós meses consecutivos en contracción.
Por su parte, el moderado avance de la producción manufacturera se explicó por los siguientes factores: (1) El crecimiento en la industria de las bebidas y del tabaco (+4.6% anual); (2) el avance nulo en la producción de equipo de transporte; (3) el incremento de 7.1% en la fabricación de productos metálicos; (4) el crecimiento de 5.8% anual en la producción de maquinaria y equipo; (5) el incremento de 1.4% en la fabricación de accesorios y aparatos eléctricos; y (6) la reducción de 1.9% anual en la producción de productos derivados del petróleo y carbón ante la fuerte reducción en los precios de los energéticos durante el primer mes del año. Finalmente, la producción de electricidad, agua y gas creció 1.6%.
Con cifras ajustadas por estacionalidad, la producción industrial creció 1.2% m/m. Por componentes, la producción manufacturera se redujo 0.1% m/m. Por su parte, el componente de construcción registró un crecimiento de 4% respecto al mes anterior, alcanzando así su mayor avance desde Febrero 2004.
Finalmente, el sector minero creció 1.4% m/m. Con estas cifras, la producción industrial presentó una caída de 0.8% a tasa anualizada durante los últimos tres meses (referirse a la siguiente gráfica). Por su parte, la producción manufacturera alcanzó un crecimiento de sólo 0.3% 3m/3m anualizado, por debajo del 1.7% observado en el cuarto trimestre del año anterior.
Esperamos una recuperación marginal de la producción industrial durante el 1T16. La reciente desaceleración que ha experimentado la producción manufacturera en los últimos meses se debe principalmente al menor ritmo de crecimiento que ha presentado este sector en EE.UU. y a la fuerte caída que han registrado los precios de los commodities, lo que ha afectado la producción de ciertos subsectores manufactureros que guardan una fuerte correlación con dichos insumos. No obstante, consideramos que el sector manufacturero podría iniciar su proceso de recuperación durante el primer trimestre del año generado por: (1) La depreciación que ha presentado la divisa mexicana en los últimos meses, lo que eventualmente favorecerá a las exportaciones mexicanas de bienes finales; (2) la recuperación marginal que ha registrado dicho sector en EE.UU. lo cual beneficiará ligeramente a la exportación de bienes intermedios; y (3) la fortaleza que ha mantenido la demanda interna, lo cual se traducirá en un mayor gasto por bienes manufactureros mexicanos.
Por su parte, es probable que la industria de la construcción privada continúe recuperándose gracias al mejor desempeño que ha presentado tanto el ingreso de los hogares mexicanos como a la oferta crediticia tanto a hogares como a empresas. Sin embargo, esta recuperación estará acotada gracias a la caída que ha presentado la inversión en proyectos públicos derivado del recorte realizado por el Gobierno Federal al gasto presupuestal.