Diciembre ha arrancado con un nuevo desafío por las presiones arancelarias de EUA sobre el resto del mundo. Después de que el presidente estadounidense anunciara ayer lunes por la mañana aranceles sobre el acero y aluminio de Argentina y Brasil, en la tarde la administración del Presidente Trump ha comunicado que impondrá aranceles del 100% a productos por valor de 2,400 millones a las exportaciones francesas, como el queso o el champán, en respuesta a la 'tasa Google' francesa (impuesto que el país europeo exige a las compañías tecnológicas estadounidenses por los ingresos percibidos a cambio de sus servicios digitales). Al mismo tiempo, las últimas noticias sobre la guerra comercial con China no son positivas porque aumentan el riesgo de que el acuerdo no se firme en el corto plazo. Así, las principales bolsas en el mundo operan con altibajos, en terreno negativo, donde la tendencia de Trump por las barreras proteccionistas sigue siendo el principal foco de atención de los inversionistas.
Respecto al conflicto comercial entre EUA y China, Trump sigue jugando con los tiempos. El mandatario estadounidense declaró que no hay plazo límite para sellar un acuerdo comercial y que podría ser mejor esperar hasta después de la elección presidencial de noviembre de 2020. El mercado sigue sin acostumbrarse por completo a los vaivenes en las declaraciones de Trump sobre el tema, y ahora especulan que podría estar en riesgo las conversaciones comerciales entre los dos países.
Con relación al tema de los aranceles a Francia, la medida de Washington surge cinco meses después de que Francia promulgara oficialmente la conocida como tasa GAFA (por las iniciales de Google (NASDAQ:GOOGL), Apple (NASDAQ:AAPL), Facebook (NASDAQ:FB) y Amazon (NASDAQ:AMZN)), su propia 'tasa Google', que fija la imposición del 3 por ciento sobre la facturación del negocio digital. Francia ha advertido de que en el caso de que EUA cumpla su amenaza habrá una respuesta "fuerte" de la Unión Europea. El conflicto con Francia también aumenta el riesgo de que Trump acabe por imponer aranceles a los automóviles europeos.
Por otro lado, en referencia al T-MEC, la situación de la ratificación en el congreso estadounidense se complicó por las nuevas demandas en materia laboral de EUA. Al parecer, legisladores demócratas han propuesto que inspectores de su país verifiquen presencialmente en las fábricas de México el cumplimiento de los compromisos laborales establecidos en el acuerdo trilateral. Esta acción, que a todas luces es una medida extraterritorial, abriría la posibilidad de que de forma subjetiva se establezcan medidas proteccionistas por sospechas de violaciones laborales (esto es, EUA pueda aplicar acciones punitivas a través de la denegación de beneficios arancelarios a las empresa que según sus criterios incumpla los compromisos laborales). Por lo pronto, el sector privado mexicano se pronunció en contra de estas medidas.
Además, el senador republicano Chuck Grassley, presidente del comité de Finanzas, auguró que para poder aprobar el T-MEC antes de que concluya el 2019, es necesario que se logre un entendimiento antes de que termine la presente semana, algo que luce muy complicado de suceder.
El peso mexicano, en línea con la mayoría de las monedas de economías emergentes, inicia la jornada presionado, en niveles que superan el $19.60 spot. Las dudas sobre el tema de la guerra comercial y T-MEC son los factores detrás de este nuevo episodio de depreciación del peso. El presidente Trump está en Londres, en el marco de la reunión de Líderes de la OTAN, por lo que no se descarta que pueda seguir haciendo comentarios sobre los temas de mayor interés para los mercados financieros globales.
Por el resto del día, el tipo de cambio podría fluctuar entre los $19.52 y $19.68 spot (el euro entre $1.104 y $1.110).