En estos momentos, mientras se desarrolla la cosecha de soja en Sudamérica, el mercado comienza a concentrarse en la disputa por superficie en EEUU de cara al ciclo 16/17.
Si bien a finales de marzo el USDA publica una encuesta entre productores de ese país en la que se conoce la intención de siembra, el organismo a finales de la semana pasada ha publicado los primeros números de oferta y demanda para el próximo año comercial.
Con respecto a soja, se está anticipando una reducción de 0.1 mill has mientras que en el caso del maíz se proyecta una expansión de 0.8 mill has; todo esto se da en un contexto en el que ambos cultivos están reflejando durante el ciclo actual las cuentas más holgadas en varias campañas.
A continuación planteamos los escenarios preliminares de producción y relación stock/consumo para cada cultivo de cara a la próxima temporada.
Con relación a este cultivo, el área norteamericana en el próximo período se ubicaría en 33.4 mill has (ver gráfico 1), transformándose en la segunda caída consecutiva luego del récord histórico alcanzado en 14/15 (33.7 mill has).
En base a esta estimación, y considerando que la proporción entre lo implantado y lo cosechado se mantiene en línea respecto a lo observado en los últimos años (cerca del 99%), la producción alcanzaría un volumen mayor a 103.7 mill tt (tal como queda expresado en el gráfico 2) en caso de que los rindes fueran los de tendencia (31.4 qq/ha).
Por el lado de la demanda, suponiendo un crushing ligeramente superior a 51.5 mill tt y exportaciones de 40.7 mill tt, las existencias finales se proyectan en 12 mill tt (barras y eje izquierdo del gráfico 3) y la relación stock/ consumo se ubicaría cerca del 11.4% (línea roja y eje derecho).
Con pequeños cambios en la productividad este ratio podría mostrar grandes variaciones, tomando en consideración que un quintal por hectárea de rendimiento promedio representa algo más de 3 mill tt sobre la oferta total. De esta manera, creemos que nos espera un mercado climático brusco, y en este contexto podríamos ver una aceleración de la volatilidad (la cual actualmente se encuentra levemente por encima del 15% para las posiciones de la nueva campaña; hace un año la veíamos en 20% y con anterioridad durante varias campañas en el rango de 25-30%).
En lo concerniente a este cultivo, y más allá de los abultados stocks con los que culminará la actual campaña, se registraría la primera suba en el área después de tres caídas consecutivas. La proyección inicial ubica la superficie en 36.4 mill has (gráfico 4).
En base a esta estimación, y asumiendo que la proporción entre lo sembrado y lo cosechado es igual al promedio de los últimos años (92%), el output sería algo mayor a 351 mill tt (esto se vislumbra en el gráfico 5) en caso de que los rindes fueran los de tendencia (105,5 qq/ha). Este nivel de oferta sería el tercero más elevado en términos histórico, 10 mill tt por debajo del pico histórico registrado en 14/15.
De concretarse estas previsiones, las existencias serían 3.5 mill tt superiores a las período en curso. En efecto, el organismo anticipa inventarios para el período 16/17 por un volumen mayor a 50 mill tt, lo que genera como consecuencia una relación stock/consumo algo mayor al 14% (escenario más holgado desde la temporada 05/06). Estas variables quedan expuestas en forma conjunto en el gráfico 6.
En lo concerniente a la relación de precios entre ambos productos en Chicago, tomando como base noviembre para soja y diciembre para maíz, se advierte que actualmente está por encima de 2.30 (tal como lo expresa la línea roja del gráfico 7) e implica uno de los mayores valores para comienzos de marzo en los últimos años.
En adelante, si el clima acompaña, es probable que este ratio se expanda con un primer objetivo de 2.50, tal como se ha verificado en la mayoría de las últimas temporadas. En contrapartida, si se registran lluvias por debajo de la media en los próximos dos meses es esperable que la relación tienda a valores de 2-2.20 (zona en la que sería más conveniente sembrar maíz).