¿Cuál es el principal riesgo hoy para los mercados? Que las actas de la última reunión del FOMC dejen abiertas las puertas a una subida de tipos en la reunión de junio.
Y es que, como ocurrió en octubre del año pasado, el mercado no lo espera.
Ayer otros dos miembros de la Reserva Federal (Fed) (Williams y Lockhart... Por cierto, consejeros que no votarán en el próximo FOMC) volvieron a dejar encima de la mesa que podría haber entre 2/3 subidas adicionales de tipos de interés. ¿Junio? No lo descartaron; no lo reconocieron.
Decían, hace ya mucho tiempo, que la principal virtud de los bancos centrales es su transparencia: no sorprender al mercado. Su previsibilidad en el manejo de la política monetaria, en tiempos tan complicados como los actuales, era sin duda una virtud a mantener.
¿Por qué subir los tipos en junio? Por mantener otra regla, más antigua incluso que la anterior. Me refiero a tomar medidas cuando se den las circunstancias para ello. Y es que, quizás en el futuro, no se puedan adoptar.
En el caso de la Fed quizás hubiera tenido que subir tipos a principios del año pasado y no esperar a diciembre. Probablemente algunos consejeros lo recuerden cuando justifiquen ahora la subida sobre la base de la relativa calma en los mercados y la mejora de los datos económicos.
¿En contra de subir tipos? Que la mejora económica es titubeante y que la subida en si misma se puede convertir en un foco de inestabilidad internacional con un caldo de cultivo (por el ejemplo, el Brexit) propicio para ello.
¿Nuestra posición? Nos decantamos porque, más allá de lo que nos digan hoy las actas, la Fed esperará a pasar el verano antes de subir sus tipos de interés. Veremos.