Por Alex Lawler
LONDRES, 23 feb (Reuters) - Cuando Rusia y tres países miembros de la OPEP liderados por Arabia Saudita accedieron hace una semana a trabajar en un acuerdo global para congelar la producción de petróleo, no pudieron ser más específicos acerca del momento de su inicio: enero de 2016.
Para la mayoría de las industrias eso sería más que suficiente para fijar de forma clara los objetivos de producción, pero no para la Organización de Países Exportadores de Petróleo, con un historial de sobreproducción y la ausencia total de cuotas individuales de bombeo en los últimos años.
Si acaso, el acuerdo fue un recordatorio de que calcular el suministro de la OPEP es una industria en sí misma y que es improbable que el acuerdo salga adelante sin una conversación seria sobre quién bombea qué.
El margen entre dos estimaciones de la producción de la OPEP -aportadas por el cártel mismo- es significativo, superando 1 millón de barriles por día (bpd) en enero. Esto es comparable con la actual sobreabundancia global, que llevó los precios hasta su mínimo desde 2003 el mes pasado.
Durante años, estas discrepancias han sido visibles a través de lo que dicen los países de la OPEP sobre sus volúmenes frente a los reportes de una mini industria de observadores del grupo, que calculan la producción haciendo un seguimiento de los tanqueros y gracias a redes de fuentes anónimas.
La OPEP reconoce esta situación y desde 2012 su informe mensual publica dos listas de cifras, una de los países miembros y otra de "fuentes secundarias", que incluyen consultores y medios de la industria.
En enero, la diferencia entre las dos listas de datos fue llamativa, sobre todo en el caso de Venezuela, que propuso el congelamiento, e Irán, que está aumentando la producción tras el levantamiento de las sanciones occidentales.
Y, en una tendencia que generó también comentarios entre los observadores y delegados de la OPEP, otros productores como Nigeria, Emiratos Árabes Unidos, Kuwait y Angola reportaron a la OPEP mayores alzas en enero que las fuentes secundarias.
"Parece como si todos en la OPEP supieran que venía un acuerdo", dijo un observador de la OPEP, en referencia al pacto del 16 de febrero entre Rusia y tres integrantes del cártel para congelar el bombeo si otros productores se unen.
Según fuentes secundarias, Irán bombeó 2,93 millones de bpd en enero. Sin embargo, reportó a la OPEP una producción de 3,37 millones de bpd, bastante más cerca del nivel previo a las sanciones, de 3,50 millones de bpd, a fines de 2011.
Venezuela asegura que extrajo 2,56 millones de bpd, comparado con los 2,32 millones de bpd que refieren las fuentes secundarias. Y Kuwait reportó un incremento de 70.000 bpd, hasta los 3,0 millones de bpd, mientras las fuentes secundarias estimaron un alza menor, hasta los 2,74 millones de bpd.
(Reporte adicional de Rania El Gamal; editado en español por Carlos Serrano)