por César Enrique Pérez Moreno
Infosel, agosto. 7.- La oleada de políticas monetarias más flexibles alrededor del mundo continuó hoy, con recortes por parte de las autoridades de India, Nueva Zelanda y Tailandia, que rebasaron las expectativas de los analistas y aumentaron la frustración del presidente Donald J. Trump por la actuación de la Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos.
En primer lugar, el banco central de la India sorprendió con un recorte de 35 puntos base a su tasa de interés de referencia, que pasó de 5.75 a 5.4%, en una decisión dividida en la que dos integrantes del comité de tasas votaron por un recorte más modesto, de un cuarto de punto porcentual.
"En la revisión de eventos globales, el Comité de Política Monetaria observó que la actividad económica desaceleró desde su reunión de junio, en un entorno hostil por las elevadas tensiones comerciales y la incertidumbre geopolítica", dijo el Banco Indio, en su comunicado. "Cada vez más, los bancos centrales de todo el mundo están flexibilizando la política monetaria, incluso a través de reducciones de las tasas de 'seguro', y se comprometen a mantener la acomodación en sus políticas".
Por su parte, el banco central de Nueva Zelanda hizo lo propio, al recortar su tasa de referencia en medio punto porcentual, de 1.5 a 1%, por arriba de lo esperado por el consenso de analistas.
"El Comité de Política Monetaria acordó que una tasa de interés oficial más baja es necesaria para seguir alcanzando sus metas de empleo e inflación", dijo el banco neozelandés, en su comunicado. "La actividad económica mundial continúa debilitándose, aliviando la demanda de bienes y servicios de Nueva Zelanda. La mayor incertidumbre y la disminución del comercio internacional han contribuido a un menor crecimiento de los socios comerciales".
Finalmente, el Banco Central de Tailandia recortó sus tasas por primera vez desde 2015, de 1.75 a 1.5%, en una decisión dividida de cinco votos contra dos.
"El Comité evaluó que la economía tailandesa se expandiría a un ritmo menor que el anticipado previamente, debido a una contracción en las exportaciones de mercancías, que comenzó a afectar la demanda interna", dijo el banco central. "Una postura de política monetaria más acomodaticia contribuiría a la continuidad del crecimiento económico y debería respaldar el aumento de la inflación general hacia la meta".
Los ajustes aplicados por estos bancos no hicieron sino irritar aún más al presidente Trump en Estados Unidos, quien ha pedido mayor laxitud por parte de la Fed.
El banco central estadounidense optó por recortar sus tasas de interés la semana pasada, por primera vez en una década, pero el ajuste de un cuarto de punto porcentual no fue suficiente para el mandatario estadounidense, que cree que el banco central debería ayudar más a la economía con tasas bajas.
"Nuestro problema es una Reserva Federal que es demasiado orgullosa para admitir su error de actuar demasiado rápido y restringir la política monetaria demasiado (¡y que yo tenía razón!). Ellos deberían recortar más y más rápido y parar su ridículo endurecimiento cuantitativo ahora", escribió Trump, en su cuenta personal de Twitter. "Vamos a ganar de cualquier manera, pero sería mucho más fácil si la Fed entendiera, lo que no hacen, que ahora estamos compitiendo con otros países".