Investing.com – Los precios del oro se han disparado bruscamente durante la jornada de negociación de este lunes en Europa, pues el interés por el metal precioso, considerado refugio seguro, se ve lastrado ante la recuperación de los mercados globales de valores.
En lo relativo a la división Comex del New York Mercantile Exchange, el oro para entrega en abril se negoció a 1.212,50 USD, mínimos intradía, para después frenar algunas pérdidas hasta situarse en 1.213,30 USD a las 3:00, hora de la costa este (las 9:00 en España), retrocediendo un 2,11% o 26,10 USD.
El oro se había elevado durante la semana anterior hasta situarse en 1.263,90 USD, impulsado por la huida de los inversores hacia el refugio seguro. Los precios del metal precioso se dispararon la semana pasada un 7,02% o 65,60 USD, siendo ésta su tercera semana consecutiva de ganancias y su mejor actuación desde diciembre de 2008.
Los precios del petróleo se han visto bien respaldados en las últimas semanas ante los indicios de que los vientos en contra de la economía y las finanzas podrían dificultar que la Reserva Federal pueda la subir los tipos de interés este año tanto como les gustaría.
Los actores del mercado empiezan a descartar que se lleve a cabo cualquier subida de tipos de interés este año, aunque la Fed aún afirma que se producirán cuatro subidas. Una subida gradual de los tipos supone menos amenaza para los precios del oro que una serie de pequeñas subidas bruscas.
Los precios del metal precioso han registrado un avance de casi un 14% en lo que va de año, pues los inversores huyen en busca de refugio seguro ante la creciente inestabilidad de otros mercados financieros.
De cara a la semana que comienza, los actores del mercado estarán muy pendientes de las actas de la última reunión sobre política monetaria de la Fed, que se publican el miércoles, para conocer más indicios acerca de si el banco central de Estados Unidos subirá o no los tipos de interés este año.
Los inversores dirigirán la atención también hacia la publicación de los datos sobre inflación de Estados Unidos, para conocer más indicios acerca del estado de la economía.
Por otra parte, los futuros sobre el cobre se dispararon más de un 2%, pues las últimas cifras comerciales de China contribuían a las preocupaciones suscitadas en torno al estado de la segunda economía del mundo.
Las exportaciones se desplomaron en enero un 11,2% con respecto al año anterior, a pesar de las expectativas que apuntaban a un descenso del 1,9%, mientras que las importaciones descendieron un 18,8%, frente a los pronósticos que hablaban de una caída del 0,8%. Esto ha situado el superávit de China del mes pasado en 63.300 millones de USD, avanzando con respecto al superávit de diciembre, que ascendía a 60.100 millones de USD.
La decepción de estos datos reforzaba la teoría de que la economía atraviesa una etapa de ralentización gradual que va a obligar a Pekín a implementar más medidas de apoyo económico en los próximos meses.
El Gigante Asiático es el mayor consumidor de cobre del mundo y concentra casi el 45% del consumo mundial.