Investing.com -- Los analistas de BofA Securities han delineado una visión clara sobre dos importantes metales industriales, el cobre y el mineral de hierro, que muestran unos fundamentales dispares.
- ¿Cómo invertir con éxito en una nueva semana de bancos centrales? Averígüelo con InvestingPro: Haga clic aquí y revise las métricas clave como el Valor Razonable asignado a partir de más de una decena de modelos financieros, la salud financiera de la empresa y las perspectivas de los analistas.
El cobre se encuentra en una posición fuerte gracias a la alta demanda, la oferta limitada y el aumento de la inversión en proyectos de transición energética.
En contraste, el mineral de hierro enfrenta desafíos debido a la caída de la demanda, particularmente del sector inmobiliario chino, que históricamente ha sido uno de los principales consumidores.
Los precios del cobre han mostrado una notable resistencia en 2024, aumentando un 6% en lo que va del año (YTD), a pesar de los desafíos macroeconómicos globales.
Los analistas de BofA atribuyen esta fortaleza a varios factores clave. Uno de ellos es la escasez de oferta minera, ya que la reducción en la producción de las minas y los desafíos en el refinado han limitado la disponibilidad de cobre.
Los costes de tratamiento y refinado (TC/RC) han caído bruscamente, lo que pone de manifiesto las dificultades a las que se enfrentan las fundiciones para procesar el cobre en las actuales condiciones de mercado.
Además, el gasto en infraestructuras energéticas, en particular los proyectos de expansión de la red relacionados con la descarbonización, ha apoyado significativamente la demanda de cobre.
En China, las inversiones en la ampliación de la red han contrarrestado la menor demanda de otros sectores, como el de la vivienda, proporcionando un apoyo crucial al metal.
Por otra parte, las interrupciones de la cadena de suministro y la limitada disponibilidad de concentrado han agravado las limitaciones de la oferta de cobre, lo que hace prever un déficit del mercado y mantiene altos los precios.
"La actividad manufacturera debería estabilizarse a medida que la Reserva Federal recorte los tipos, por lo que mantenemos nuestra visión constructiva del cobre hasta 2025", afirman los analistas.
Como resultado, se espera que los precios del cobre sigan subiendo, con previsiones que sugieren un ascenso hasta los 10.750 $/t en 2025.
Históricamente gran consumidor de acero y mineral de hierro, el sector inmobiliario chino ha reducido drásticamente su demanda.
En 2010, representaba el 50% del consumo de mineral de hierro de China, pero en 2024, este porcentaje se habrá reducido a sólo el 20%, impulsado por las medidas enérgicas del gobierno contra las inversiones especulativas y una desaceleración a largo plazo de la construcción de viviendas.
Además, la producción de acero, que está estrechamente vinculada a la demanda de mineral de hierro, también ha disminuido. Aunque la demanda de otros sectores, como el de maquinaria, ha aportado cierto apoyo, no ha sido suficiente para compensar la caída en la construcción.
Esto ha llevado a márgenes negativos en las acerías chinas, lo que ha resultado en nuevos recortes de producción. Por el lado de la oferta, grandes productores como Australia y Brasil han continuado aumentando sus exportaciones de mineral de hierro, exacerbando aún más el problema del exceso de oferta.
"Con un excedente de 190 millones de toneladas, es decir, el 7,5% de la oferta total prevista para el año que viene, los precios podrían caer por debajo de los 80 dólares por tonelada, para incentivar a los grandes mineros a dejar de aumentar la oferta o a retirar del mercado algunas de las operaciones más costosas, especialmente en China", señalan los analistas.
Las diferencias entre los mercados del cobre y del mineral de hierro radican en sus fundamentos de oferta y demanda.
Es probable que el cobre, esencial para la transición mundial a la energía verde y con una oferta minera ajustada, mantenga su precio.
Por otro lado, el mineral de hierro, que depende del debilitado sector inmobiliario chino y de la creciente oferta global, se ve sometido una presión continua a la baja sobre sus precios.
BofA mantiene una visión optimista sobre el cobre debido a la sólida demanda estructural y prevé que la apreciación de los precios continúe a medida que las economías globales se estabilicen y se aceleren los proyectos de energía verde.
El futuro del mineral de hierro parece incierto, ya que el exceso de oferta y la debilidad en la demanda podrían llevar a nuevas caídas en los precios, a menos que se implementen recortes drásticos en la producción.
- ¿Le gustaría saber cómo organizan sus carteras los inversores con más éxito? InvestingPro le da acceso a las estrategias y carteras de los mejores inversores. Además, recibirá cada mes más de 100 recomendaciones de valores basadas en análisis respaldados por IA. ¿Siente curiosidad? Haga clic aquí para obtener más información.