La actividad empresarial del Reino Unido experimentó un notable repunte en agosto, con el índice compuesto de gestores de compras (PMI) de S&P Global subiendo a su nivel más alto en cuatro meses, lo que indica una trayectoria de crecimiento sostenido en el segundo semestre de 2024.
El índice compuesto, que es un indicador clave de la salud económica, subió a 53,4, superando la previsión media de los economistas que anticipaban una lectura de 52,9. Este aumento desde la cifra de 52,8 de julio marca la lectura más alta desde abril.
Los datos del PMI, que reflejan las actividades económicas de los sectores manufacturero y de servicios, sugieren que la economía británica está en vías de expandirse a un ritmo trimestral del 0,3%. Aunque esta tasa indica una desaceleración respecto al crecimiento más robusto observado en el primer semestre del año, se mantiene por encima de la tasa media de crecimiento de los dos últimos años.
El economista jefe de S&P Global Market Intelligence destacó los aspectos positivos de los datos de agosto, afirmando que "agosto está siendo testigo de una bienvenida combinación de crecimiento económico más fuerte, mejora de la creación de empleo y descenso de la inflación, según los datos provisionales de la encuesta PMI".
La relajación de las presiones sobre los costes también fue un aspecto significativo de la encuesta, ya que la tasa de aumento de los costes empresariales se situó en su nivel más bajo desde enero de 2021. Además, la encuesta indicó una disminución del ritmo al que las empresas están subiendo sus precios.
Esta moderación de las presiones inflacionistas tiene implicaciones para la política monetaria del Banco de Inglaterra, como señaló Williamson: "Los últimos datos de la encuesta ayudan, por tanto, a rebajar el listón para nuevos recortes de los tipos de interés." Sin embargo, también advirtió que, debido a la persistente inflación en el sector servicios, es probable que los responsables políticos procedan con cautela.
Las expectativas sobre la política de tipos de interés del Banco de Inglaterra coinciden con estas conclusiones, y una encuesta reciente entre economistas pronostica un único recorte de tipos a finales de este año, en noviembre.
El sector servicios, que es un componente crucial de la economía británica, se mostró resistente, con un PMI que subió hasta 53,3 desde 52,5 en julio, lo que supone el nivel más alto desde abril. El consenso había situado el PMI de servicios en 52,8 puntos.
El sector manufacturero también mostró un impulso de crecimiento, con su PMI alcanzando 52,5, desde 52,1, y registrando la mayor expansión desde junio de 2022. En particular, el sector registró la tasa de creación de empleo más rápida en más de dos años.
Reuters ha contribuido a este artículo.Este artículo fue traducido con la ayuda de inteligencia artificial. Para obtener más información, consulte nuestros Términos de Uso.