Por Carjuan Cruz
Investing.com - “No espero una recesión”, dijo hoy la secretaria del Tesoro de Estados Unidos, Janet Yellen, descartando que la economía estadounidense retroceda ante las dificultades globales actuales, como los problemas en las cadenas de suministro, la inflación y la guerra en Ucrania, luego de la invasión rusa. Además de los nuevos bloqueos en China por brotes de Covid-19.
La funcionaria aseguró que la economía estadounidense está demostrando ser “resistente” a estas circunstancias. Sin embargo, advirtió como probable que la inflación se mantenga alta “por un tiempo más”.
A pesar de este pronóstico negativo para el alza de los precios, la secretaria del Tesoro señaló que es posible que la inflación ya haya llegado a su punto máximo en marzo, cuando el índice se ubicó en 8.5% anual en Estados Unidos, la más alta en 40 años.
El presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, se pronunció ayer indicando que el organismo subiría las tasas 50 puntos en su próxima reunión de política monetaria el 4 de mayo. El alto funcionario indicó que la Fed aplicaría las medidas necesarias para atender la inflación con la previsión de evitar una recesión.
La guerra en Ucrania y los bloques en China complicaron aún más los problemas que enfrentaba la economía global para recuperarse, después de los cierres generales que se llevaron a cabo por la pandemia.
Los cuellos de botella y la mano de obra limitada dificultaron que la producción alcanzara a mayor ritmo sus niveles previos al Covid-19, y se acentuaron desequilibrios ante una demanda que caminaba más rápido, lo que presionó los precios rapidamente.
De hecho, esta semana el Fondo Monetario Internacional rebajó su proyección de crecimiento global para 2022 y 2023 a 3.6%, lo que implica una ralentización significativa de la economía mundial que creció 6.1% en 2021.
Incluso el Banco Mundial disminuyó su pronóstico de crecimiento global por debajo del FMI, a 3.2% en 2022.