Investing.com - La primera ministra Theresa May parecía ir bien encaminada hacia la consecución de sus objetivos pues los ministros de ambas facciones parecían satisfechos al concluir las ocho horas de reunión del jueves por la noche.
No obstante, la primera ministra tiene grandes obstáculos por delante ya que la Comisión Europea rechazó los planes del Reino Unido “seleccionados cuidadosamente” mientras que un cambio en la postura por parte del partido laborista de la oposición podría resultar problemático.
Los informes de la BBC y el Financial Times han indicado que tanto los ministros a favor de permanecer en el Reino Unido como los partidarios de abandonarla se fueron de Chequers satisfechos, tras pasar el día en la casa de campo de la primera ministra en Buckinghamshire.
Parece que os ministros han llegado a un acuerdo con “Canadá +++” y seguir las normas actuales de la EU, bajo sus propias condiciones.
En el intento de unir a su gabinete, Theresa May invitó a sus más altos ministros del gabinete, denominados el “comité de guerra” al retiro para limar asperezas y poder formar un frente más unido con miras a las conversaciones sobre la transición, que comenzará el 22 de marzo en la cumbre de la UE.
La primera ministra dará un discurso en función del resultado del retiro, estableciendo “el rumbo” del país tras el Brexit. También anunciará las conclusiones de Chequers en la Cámara de los Comunes el martes.
El discurso será el último de una serie de seis discursos “de camino hacia el Brexit” ofrecidos por los principales miembros del gabinete, dirigidos a aclarar la postura del Gobierno sobre la futura relación del Reino Unido y la UE tras la salida del Reino Unido en marzo de 2019. La oficina de la primera ministra describe los discursos como “grito de guerra para los que están a ambos lados del debate del Brexit”.
El ministro de asuntos exteriores, Boris Johnson, abrió los discursos el miércoles pasado en Londres, mientras que el secretario del Brexit, David Davis, pronunció un discurso en Viena el martes. Theresa May dio el primero de sus discursos en Munich el sábado. El ministro de comercio, partidario del Brexit, Liam Fox, y el ministro del gabinete David Lidington comparecerán la semana que viene.
Philip Hammond, que recorrió Europa la semana pasada para reunirse con varios ministros de economía europeos y ha sido criticado por su postura pro-UE, no tiene previsto hacer un discurso de “camino hacia el Brexit”.
Theresa May habló de su “triple enfoque” del Brexit, mientras que Davis destacó sus planes de permanecer cerca de la Unión Europea, pero en sus propios términos. Mientras se conocen más detalles sobre los planes “cuidadosamente seleccionados” del Reino Unido, la Comisión Europea publicó un documento de 59 páginas el miércoles bajo el título “Divergencia normativa” en el que rechazan las propuestas del Gobierno británico sobre las futuras relaciones comerciales.
La Comisión decía en su informe que el Reino Unido no tendrá los mismos derechos y beneficios como miembros debido a su rechazo de propuesta normativa de la UE, así que no habrá “ningún reconocimiento mutuo”. Davis proponía en su discurso que a través del 'reconocimiento mutuo' el Reino Unido y la UE podrían crear el mismo tipo de acuerdo que tiene la UE con Canadá y Corea del Sur.
May se enfrenta a otro problema esta semana pues Jeremy Corbyn, líder del partido laborista, parece estar ablandando su postura con respecto al Brexit ya que habló de permanecer en la unión aduanera durante su discurso del martes. Corbyn dará un discurso sobre el Brexit el lunes, cuando su partido decida qué enmiendas añadir en el proyecto de ley.
El apoyo de Corbyn a una unión aduanera enturbia las aguas de May, ya que podría desembocar en una mayoría parlamentaria a favor de una enmienda a la ley del Brexit para incluir una cláusula de unión aduanera.
La enmienda, presentada por el miembro del partido conservador, Stephen Hammond, ha recibido un gran apoyo multipartidista, y podría ser el próximo gran quebradero de cabeza para Theresa May, que perdió su mayoría en las elecciones de junio de 2017.
La enmienda dice: 'Será objetivo de una autoridad competente tomar todas las medidas para implementar un acuerdo de comercio internacional que permita que el Reino Unido participe tras su salida en una unión aduanera con la UE”.
La votación de la enmienda en la Cámara de los Comunes estaba prevista la próxima semana, pero el Gobierno ha anunciado este viernes que se retrasará.