Investing.com – Los precios de las acciones están subiendo, el desempleo está descendiendo y los consumidores tienen confianza en la economía estadounidense.
Si esto te suena demasiado bien, algunos analistas afirman que puedes estar en lo cierto.
Tras la imagen de una sólida economía en EE.UU., hay un signo de alarma: la caída de la tasa de ahorro.
La tasa de ahorro ha ido en descenso en los dos últimos ejercicios y ha marcado recientemente un mínimo de 12 años en el 2,4%.
Los economistas dicen que cuando los consumidores se sienten optimistas sobre la economía, tienden a ahorrar menos y a gastar más.
También suelen pedir más préstamos, lo que ha impulsado la deuda en tarjetas de crédito de vuelta a máximos históricos.
Es una combinación preocupante.
El gasto de los consumidores representa el 70% de la actividad económica de Estados Unidos, por lo que cualquier repunte en el ahorro dañaría el gasto y ralentizaría el crecimiento general.
El descenso de la tasa de ahorro también implica que los consumidores tienen un colchón más pequeño al que recurrir cuando la economía se debilita.
Estados Unidos ha tenido durante mucho tiempo una de las tasas de ahorro más bajas entre los países desarrollados.