Investing.com – Los observadores del mercado y los aficionados a la Fed obtuvieron muchas cosas que no esperaban del nuevo presidente de la institución monetaria, Jerome Powell, pero deberían estar contentos en cualquier caso con su primera comparecencia ante el Congreso.
En primer lugar, Powell respondió a las preguntas de forma afable, directa y sucinta, sin la jerga técnica y dispersa que sus predecesores algunas veces mostraban.
Lo que dijo quedó perfectamente claro, incluso si no era lo que la gente hubiera querido escuchar.
Lo más importante es que Powell introdujo la posibilidad de una cuarta subida de los tipos de interés este año, asumiendo un tono hawkish (agresivo) comparado con su antecesora, Janet Yellen.
También dijo que no ve la corrección de los mercados bursátiles y la volatilidad como una amenaza para la economía o como un factor en la política monetaria.
Y Powell tampoco ve una amenaza inflacionaria en los programas fiscales de la Administración Trump.
El nuevo presidente del banco central declaró lo obvio: que ambas, economía e inflación, estaban más fuertes que en diciembre, cuando la Fed presentó su escenario de tres ajustes de los tipos de interés.
Por lo tanto, hay que esperar hasta mediados de marzo, cuando se espera la primera subida de tipos de la Fed este año y sus nuevas previsiones trimestrales.