México, 16 jul (.).- México defenderá la imposición de aranceles adoptada "en respuesta" a las medidas establecidas por EEUU contra el acero y el aluminio procedentes del país latinoamericano, informó hoy la Secretaría (ministerio) de Economía.
"Hoy en Ginebra EEUU solicitó a México, Canadá, la Unión Europea, China y Turquía el inicio de consultas en el marco de la Organización Mundial de Comercio (OMC) por la imposición de aranceles a determinados productos agroindustriales, acero y aluminio procedentes de EEUU", señaló el departamento en un comunicado.
El Departamento estadounidense de Comercio presentó quejas formales contra las cinco economías ante este organismo mundial por considerar que las medidas que aplicaron son "ilegales", a diferencia de los gravámenes impuestos por la Casa Blanca que responden a un tema de "seguridad nacional".
Al respecto, el Gobierno de México indicó hoy que analizará la solicitud hecha por la Casa Blanca, a fin de emitir una respuesta antes de diez días.
"Y en caso de que resulte procedente, establecer conjuntamente con el Gobierno de Estados Unidos la fecha para celebrar las consultas solicitadas por ese país", agregó.
No obstante, recordó que la medida aplicada por México fue "en respuesta a los aranceles impuestos, de manera injustificada y bajo el argumento de seguridad nacional" por el Gobierno estadounidense a las importaciones de acero y aluminio procedentes de México.
Reiteró que las compras que hace EEUU de acero y aluminio de México no representan "una amenaza a la seguridad nacional de ese país".
"Por el contrario, la sólida relación comercial entre México y EEUU ha generado un mercado regional integrado donde los productos de acero y aluminio contribuyen a la competitividad de la región en diversos sectores estratégicos, como el de automoción, aeroespacial, eléctrico y electrónico", apuntó.
Así, el Gobierno mexicano reiteró su "compromiso de continuar con la defensa de los intereses de la industria nacional" frente a medidas "unilaterales" contrarias a derechos y obligaciones pactados en derecho comercial internacional.
A finales de mayo, EEUU inició una guerra comercial con sus socios, aliados y competidores al anunciar el Departamento de Comercio la suspensión de la exención a la imposición de aranceles a la importación de acero y aluminio de la UE, Canadá y México.
De inmediato, el Gobierno mexicano anunció que respondería con "medidas equivalentes a diversos productos" agrícolas e industriales.
Adicionalmente, la decisión de Washington coincide con la denuncia formal presentada horas antes por Pekín contra EEUU por su decisión de imponer aranceles adicionales por valor de 200.000 millones de dólares a una lista de productos chinos.