Un nuevo trabajo académico presentado en la conferencia anual de investigación de la Reserva Federal de Kansas City en Jackson Hole, Wyoming, destaca la significativa influencia que las tenencias de bonos hipotecarios de la Reserva Federal tienen en la economía estadounidense. El documento, que evalúa el uso que hace la Reserva Federal de los bonos del Tesoro y los bonos hipotecarios junto con los objetivos de tipos de interés para influir en el impulso económico, se ha debatido hoy.
La investigación examina la estrategia de la Reserva Federal conocida como flexibilización cuantitativa (QE), que consiste en comprar bonos del Tesoro y bonos hipotecarios para controlar el ritmo de la economía. A partir de la primavera de 2020, la QE hizo que las tenencias de la Reserva Federal aumentaran hasta aproximadamente 9 billones de dólares en el verano de 2022, y que las tenencias de bonos hipotecarios pasaran de alrededor de 1,4 billones de dólares en marzo de 2022 a un máximo de 2,7 billones de dólares.
La importancia de las compras de hipotecas se ve subrayada por el papel que desempeña el sector de la financiación de la vivienda en la economía estadounidense.
Los autores del documento ofrecen una visión de los efectos de la compra de bonos hipotecarios por parte de la Fed, señalando que tanto los bancos privados como la Fed contribuyeron a una reducción de aproximadamente 40 puntos básicos en el diferencial hipotecario durante 2020 y 2021. Esta acción se tradujo en un aumento de aproximadamente 3 billones de dólares en la originación de hipotecas y alrededor de 1 billón de dólares en la emisión neta de bonos hipotecarios, siendo los bancos responsables de la mitad de este aumento.
El documento indica que estas medidas impulsaron significativamente el gasto de los consumidores y la inversión residencial. El papel de la Fed en el mercado de bonos hipotecarios también se extiende a sus esfuerzos de endurecimiento cuantitativo (QT), que implican la reducción de sus tenencias de bonos. En la actualidad, las tenencias totales de la Reserva Federal se han reducido a 7,3 billones de dólares, con las tenencias hipotecarias en 2,3 billones de dólares, ya que deja que los bonos venzan sin reemplazarlos.
La QT ha sido más lenta de lo previsto debido a la atonía del mercado inmobiliario y a los elevados costes de los préstamos, que han frenado la creación de hipotecas. Esto, a su vez, ha afectado a la capacidad de la Fed para reducir sus tenencias de bonos hipotecarios.
Se especula con la posibilidad de que, para alcanzar su objetivo de mantener principalmente bonos del Tesoro, la Reserva Federal tenga que vender activamente bonos hipotecarios. El calendario para el final de la QT sigue siendo incierto.
Reuters ha colaborado en la elaboración de este artículo.Este artículo fue traducido con la ayuda de inteligencia artificial. Para obtener más información, consulte nuestros Términos de Uso.