Por Laura Sánchez
Investing.com - La Reserva Federal estadounidense (Fed) probablemente tendrá que comenzar a subir las tasas de interés a finales de 2022 o principios de 2023, ya que el aumento del gasto público mantiene la inflación por encima de su objetivo promedio a largo plazo, según advierte el Fondo Monetario Internacional (FMI) y recoge Bloomberg.
Además, el organismo comenzará a reducir las compras de activos, conocido como tapering, en la primera mitad de 2022, apunta el FMI.
"La gestión de esta transición, desde brindar la tranquilidad de que la política monetaria continuará brindando un poderoso apoyo a la economía hasta prepararse para una eventual reducción de las compras de activos y el final de la política monetaria acomodaticia, requerirá comunicaciones hábiles en un plazo de tiempo potencialmente ajustado", resalta el comunicado.
La Fed mantuvo sin cambios las tasas de interés en su última reunión (15-16 de junio), si bien señaló dos aumentos de tasas para 2023 y 7 de los 18 responsables políticos reflejaron su preferencia de subir las tasas en 2022, frente a los 4 de la reunión anterior, celebrada en marzo.
El indicador de precios de los gastos de consumo personal que la Fed utiliza para su meta de inflación aumentó un 3.9% en mayo con respecto al año anterior, la mayor cantidad desde 2008. El FMI pronostica que el aumento será transitorio, con un índice máximo de 4.3% y una caída de alrededor de 2.5 % para fines de 2022. Aún está por encima del objetivo promedio a largo plazo de la Fed del 2%, señala Bloomberg.
El FMI ha elevado su estimación de crecimiento de la economía norteamericana este año a 7%, el ritmo más rápido desde 1984, desde un pronóstico del 6.4% en su pasada revisión de abril.