por Lissette Esquila Alonso
(Actualiza con detalles a lo largo de la historia)
Infosel, marzo. 14.- Los inversionistas foráneos sacaron sus capitales de la renta variable mexicana por segundo mes consecutivo, en medio del recelo global provocado por la guerra en Ucrania, el aumento de la inflación y los planes de normalización de las medidas ultra laxas de política monetaria de la Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos.
En febrero los flujos de capital extranjero registraron una salida de 264.5 millones de dólares y en los dos primeros meses de 2022 ya acumula 297.9 millones, una cantidad 34% inferior al retiro registrado en el primer bimestre de 2021, que fue de 456.4 millones de dólares, de acuerdo con datos publicados por Banco de México.
La salida de los extranjeros de los mercados accionarios locales se dio pese a que el segundo mes del año los índices bursátiles de México, S&P/BMV IPC y FTSE Biva, subieron 4.03 y 3.87%, respectivamente, no obstante para el primer bimestre del año, las ganancias no fueron tan altas, ya que los índices subieron marginalmente por eventos que generaron alta volatilidad global.
En los últimos meses los mercados accionarios han tenido oscilaciones marcadas por factores que generan alto nerviosismo, como datos que confirmaron que los problemas inflacionarios no son tan temporales como se esperaba, lo que ejerce presión para una acción más contundente y dura por parte de los bancos centrales para combatir dicho problema.
No obstante, las acciones de los bancos centrales podrían complicarse por un escenario de conflicto bélico que se vive en Europa del Este, cuyas tensiones geopolíticas derivadas abonaron incertidumbre al impacto que causaría ello en los ya de por sí elevados precios de los energéticos y otras materias primas.
"Sin duda los retos prevalecen para el referente mexicano de la mano del escenario global antes descrito y con los propios retos de una política monetaria que presiona las valuaciones", escribieron integrantes de la mesa de análisis de Invex Grupo Financiero en un reporte.
El hecho que los bancos centrales retiren estímulos económicos y eleven las tasas de interés hace que el precio del dinero se encarezca y que los consumidores limiten sus gastos, lo que de cierta manera podría ayudar a bajar la inflación, aunque el aumento de los precios se ha dado más en productos alimenticios y en energéticos, insumos que las personas difícilmente podrían dejar de consumir.
Y sin duda, el retiro de la liquidez global afecta mayormente a los activos de riesgo, principalmente los de mercados emergentes, como México.
"Los planes de normalización de la política monetaria se complican, ante la combinación de una mayor inflación y un crecimiento más débil como resultado de la guerra", escribió el equipo de análisis de CIBanco dirigido por Jorge Gordillo, director de análisis económico y bursátil.
Desde el inicio del conflicto militar, se han reportado constantes problemas para transportar las materias primas fuera de ambos territorios, lo que limita la oferta de los granos en el resto del mundo, al tiempo que eleva el costo de los fletes.
Gordillo y su equipo considera que los aunque los precios de las materias primas se mantengan más altos de manera persistente en el corto plazo, es de esperarse que en cuanto el problema geopolítico finalice gran parte del aumento visto retroceda en unos pocos meses. Pero el problema con este argumento es que implica que los bancos centrales regresen con su tesis de que las presiones inflacionarias se deben a factores temporales, algo que difícilmente los mercados financieros volverían a creer.
"Sin duda, es probable que una solución a este conflicto dé un respiro a los commodities y, así como el aumento en los precios de estos insumos fue vertical, éstos podrían ajustar a la baja significativamente. La incógnita sigue siendo la temporalidad del conflicto Rusia-Ucrania", agregaron los expertos de Invex.
Pese a la salida de capitales extranjeros, el saldo acumulado de dichos flujos llegó en febrero a 157 mil 350.9 millones de dólares, lo que fue un ascenso de 4.4% con respecto a enero y un aumento de 17% desde el saldo acumulado a febrero de 2021, cuando llegó a 134 mil 435.2 millones, la cifra más baja desde noviembre de 2020.
El aumento del saldo acumulado podría reflejar el mejor comportamiento del tipo de cambio en febrero, ya que el peso avanzó 0.5% frente al dólar en dicho mes.
(Actualiza con detalles a lo largo de la historia)
Infosel, marzo. 14.- Los inversionistas foráneos sacaron sus capitales de la renta variable mexicana por segundo mes consecutivo, en medio del recelo global provocado por la guerra en Ucrania, el aumento de la inflación y los planes de normalización de las medidas ultra laxas de política monetaria de la Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos.
En febrero los flujos de capital extranjero registraron una salida de 264.5 millones de dólares y en los dos primeros meses de 2022 ya acumula 297.9 millones, una cantidad 34% inferior al retiro registrado en el primer bimestre de 2021, que fue de 456.4 millones de dólares, de acuerdo con datos publicados por Banco de México.
La salida de los extranjeros de los mercados accionarios locales se dio pese a que el segundo mes del año los índices bursátiles de México, S&P/BMV IPC y FTSE Biva, subieron 4.03 y 3.87%, respectivamente, no obstante para el primer bimestre del año, las ganancias no fueron tan altas, ya que los índices subieron marginalmente por eventos que generaron alta volatilidad global.
En los últimos meses los mercados accionarios han tenido oscilaciones marcadas por factores que generan alto nerviosismo, como datos que confirmaron que los problemas inflacionarios no son tan temporales como se esperaba, lo que ejerce presión para una acción más contundente y dura por parte de los bancos centrales para combatir dicho problema.
No obstante, las acciones de los bancos centrales podrían complicarse por un escenario de conflicto bélico que se vive en Europa del Este, cuyas tensiones geopolíticas derivadas abonaron incertidumbre al impacto que causaría ello en los ya de por sí elevados precios de los energéticos y otras materias primas.
"Sin duda los retos prevalecen para el referente mexicano de la mano del escenario global antes descrito y con los propios retos de una política monetaria que presiona las valuaciones", escribieron integrantes de la mesa de análisis de Invex Grupo Financiero en un reporte.
El hecho que los bancos centrales retiren estímulos económicos y eleven las tasas de interés hace que el precio del dinero se encarezca y que los consumidores limiten sus gastos, lo que de cierta manera podría ayudar a bajar la inflación, aunque el aumento de los precios se ha dado más en productos alimenticios y en energéticos, insumos que las personas difícilmente podrían dejar de consumir.
Y sin duda, el retiro de la liquidez global afecta mayormente a los activos de riesgo, principalmente los de mercados emergentes, como México.
"Los planes de normalización de la política monetaria se complican, ante la combinación de una mayor inflación y un crecimiento más débil como resultado de la guerra", escribió el equipo de análisis de CIBanco dirigido por Jorge Gordillo, director de análisis económico y bursátil.
Desde el inicio del conflicto militar, se han reportado constantes problemas para transportar las materias primas fuera de ambos territorios, lo que limita la oferta de los granos en el resto del mundo, al tiempo que eleva el costo de los fletes.
Gordillo y su equipo considera que los aunque los precios de las materias primas se mantengan más altos de manera persistente en el corto plazo, es de esperarse que en cuanto el problema geopolítico finalice gran parte del aumento visto retroceda en unos pocos meses. Pero el problema con este argumento es que implica que los bancos centrales regresen con su tesis de que las presiones inflacionarias se deben a factores temporales, algo que difícilmente los mercados financieros volverían a creer.
"Sin duda, es probable que una solución a este conflicto dé un respiro a los commodities y, así como el aumento en los precios de estos insumos fue vertical, éstos podrían ajustar a la baja significativamente. La incógnita sigue siendo la temporalidad del conflicto Rusia-Ucrania", agregaron los expertos de Invex.
Pese a la salida de capitales extranjeros, el saldo acumulado de dichos flujos llegó en febrero a 157 mil 350.9 millones de dólares, lo que fue un ascenso de 4.4% con respecto a enero y un aumento de 17% desde el saldo acumulado a febrero de 2021, cuando llegó a 134 mil 435.2 millones, la cifra más baja desde noviembre de 2020.
El aumento del saldo acumulado podría reflejar el mejor comportamiento del tipo de cambio en febrero, ya que el peso avanzó 0.5% frente al dólar en dicho mes.