Por Laura Sánchez
Investing.com - Ya veníamos advirtiendo en los últimos días del malestar de China de los aranceles previstos para diciembre y, finalmente, el gigante asiático se ha posicionado oficialmente al respecto.
Según informa South China Morning Post, el país asiático exigirá a Estados Unidos que elimine estas tarifas a cambio de compras agrícolas, en una conversación telefónica prevista para este viernes entre el representante de Comercio de Estados Unidos, Robert Lighthizer, el secretario del Tesoro dl país norteamericano, Steven Mnuchin, y el viceprimer ministro chino, Liu He.
Esta conversación da continuidad a las negociaciones en Washington a principios de este mes, con el objetivo de allanar el camino para un acuerdo de "fase uno".
No obstante, China es muy clara. “Para sellar el acuerdo, se espera que Pekín solicite a Washington que retire su plan de imponer aranceles a productos chinos por valor de 156.000 millones de dólares, incluidos teléfonos móviles, computadoras portátiles y juguetes, que entrarán en vigor el 15 de diciembre”, según el diario chino.
“Es probable que Pekín también busque la eliminación de los aranceles del 15% impuestos el 1 de septiembre sobre alrededor de 125.000 millones de dólares en productos chinos”, asegura South China Morning Post, en boca de una fuente que prefiere permanecer en el anonimato.
A esto se suma que, según una información de Bloomberg, de la que se hace eco José Luis Cárpatos, CEO de Serenity Markets, “China solo se comprometería a compran 20.000 millones de dólares el primer año. Y se comprometería a los 40.000-50.000 millones sería solo si Trump quita todos los aranceles, lo cual parece utópico”.
“Es decir nos están tomando el pelo Kudlow, Navarro y Trump cuando dicen que los chinos comprarán de 40.000 a 50.000 millones. Eso parece muy difícil. No tienen nada. No hay ningún acuerdo. No hay fase 1 de la fase 2 de la primera parte de la parte contratante”, añade este experto.
Hu Xijin, editor jefe del diario Global Times y considerado como el portavoz no oficial del gigante asiático, ha escrito en su cuenta de Twitter, en relación a unos comentarios del vicepresidente estadounidense Mike Pence. “Mi primer pensamiento: el discurso de Pence tocó la misma vieja melodía al retratar y definir a China. Pero habló de manera bastante positiva sobre la mejora de las relaciones entre China y Estados Unidos, diciendo que Estados Unidos no quiere separarse de China, y los dos pueden y deben trabajar para compartir un futuro pacífico y próspero”.
Vuelve así, por tanto, la presión en la eterna guerra comercial entre EE.UU. y China, si es que alguna vez fue tranquila. Está por ver como responde Estados Unidos a esta nueva petición china en plena tregua.