Por Sara Busquets
Investing.com - “El mercado europeo mostró preocupación a principios de año, pero esa tendencia se ha revertido en los últimos meses. Si observamos la evolución de la renta variable y el indicador del euro, podemos concluir que se anticipan buenas noticias en torno al crecimiento de cara a 2020”. Esta fue una de las declaraciones que realizó ayer Steven Trypsteen, economista de ING (AS:INGA), en un desayuno que organizó este banco holandés y en el que presentó sus perspectivas para el próximo año.
Trypsteen afirmó que todo apunta a un estado de estabilidad en el crecimiento europeo. Aunque todavía es pronto para decir que los nubarrones han desaparecido, sí apuntó a los últimos datos positivos de manufacturas (sobre todo contribuyendo a despejar las dudas en torno a Alemania) y a la evolución reciente del PIB, que a nivel europeo debería estabilizarse alrededor del 1% en los próximos meses. Será una mejora muy lenta, pero nos estará alejando de la recesión que tanto nos asustó este mismo año, aseguró el economista.
Mención especial para España que, en su opinión, tiene una de las mejores saludes económicas de la zona euro. “En el caso de España, esperamos un crecimiento del 1,4% para 2020 y del 1,5% para 2021”. Aunque la incertidumbre política y el desempleo seguirán preocupando -buena prueba de ello es la confianza de los consumidores, en su nivel más bajo desde diciembre de 2014-, lo cierto es que a nivel político el hecho de que llevemos ya mucho tiempo así ha logrado que terminemos acostumbrándonos, mientras que los últimos datos de paro apuntan a una interrupción en la tendencia bajista vista hasta ahora.
Guerra comercial, Brexit… Bancos centrales…
En la presentación fue inevitable escapar de los grandes temas que han condicionado a los mercados a lo largo de todo 2019. Trypsten los repasó uno por uno, concluyendo lo siguiente:
Guerra comercial: “Trump quiere un acuerdo con China, lo que supone buenas noticias en el corto plazo. Sin embargo, las tensiones seguirán elevadas en el medio-largo plazo, pues planean las elecciones en EE.UU. y eso podría condicionar el calendario del acuerdo".
Brexit: “Johnson no quiere una extensión del periodo de transición, por lo que esperamos un acuerdo en enero. El problema son los temas comerciales, algo que no creemos se resuelva durante 2020. De ser así, eso supondría un problema para el conjunto de la zona euro".
BCE: “La inflación subyacente está todavía muy baja y lejos de alcanzar el objetivo del 2% del organismo. Eso nos hace pensar que seguiremos con tipos bajos durante un largo periodo de tiempo, como en Japón. Así que podríamos ver tipos en negativo, al menos, hasta 2021”.