Por Laura Sánchez
Investing.com - “T.S. Eliot dijo que ‘cada momento es un nuevo comienzo’ y así lo siento yo hoy. Pero también se puede aplicar a Europa. El tema del programa de este año es ‘Europa: nuevos enfoques’, y eso parece muy apropiado”.
Así ha comenzado Christine Lagarde su primera comparecencia en el Congreso Bancario Europeo como presidenta del BCE.
No ha tardado Lagarde en ir al grano. “Las continuas tensiones comerciales y las incertidumbres geopolíticas están contribuyendo a una desaceleración en el crecimiento del comercio mundial, que se ha reducido a más de la mitad desde el año pasado. Esto a su vez ha deprimido el crecimiento mundial a su nivel más bajo desde la gran crisis financiera”.
“Estas incertidumbres han demostrado ser más persistentes de lo esperado, y esto está impactando claramente en la Zona Euro”, ha dicho Lagarde, que ha comunicado que se espera que el crecimiento económico de la Eurozona sea del 1,1% este año, 0,7 puntos porcentuales menos de lo previsto hace un año.
“Las economías avanzadas se encuentran en medio de una desaceleración a largo plazo en las tasas de crecimiento, que se refleja en la disminución de los tipos de interés a nivel mundial. Incluso los países que han tratado de elevar los tipos, los han vuelto a bajar gradualmente”, ha apuntado Lagarde.
La presidenta del BCE ha lanzado esta pregunta: ¿Qué pueden hacer las políticas públicas para desarrollar aún más nuestra demanda interna y potencial de crecimiento, al tiempo que alientan a las empresas dinámicas y competitivas a nivel mundial?
“La postura política acomodaticia del BCE ha sido un impulsor clave de la demanda interna durante la recuperación, y esa postura se mantiene. El BCE continuará apoyando a la economía y responderá a los riesgos futuros de acuerdo con nuestro mandato de estabilidad de precios. Y monitorearemos continuamente los efectos secundarios de nuestras políticas”, ha comentado Lagarde.
No obstante, también ha pedido un mayor esfuerzo a los países miembros. “Está claro que la política monetaria podría alcanzar su objetivo más rápido y con menos efectos secundarios si otras políticas respaldaran el crecimiento junto con él”.
Lagarde ha concluido su discurso con una frase de San Francisco de Asís: “Comienza haciendo lo que sea necesario; entonces haz lo que sea posible; y de repente estarás haciendo lo imposible".