Por Charlotte Greenfield
WELLINGTON, 27 ene (Reuters) - La firma neozelandesa de dispositivos médicos Fisher & Payne Healthcare considerará la posibilidad de cambiar de México a Nueva Zelanda sus fábricas de productos con destino a Estados Unidos si el Gobierno del presidente Donald Trump decide aplicar tarifas sobre importaciones de bienes producidos en plantas mexicanas.
La compañía FPH.NZ , un importante proveedor mundial de equipos respiratorios especializados para hospitales, es una de las primeras empresas con operaciones en México en revelar cómo respondería al arancel propuesto por el Gobierno de Trump sobre las importaciones procedentes de la frontera sur de Estados Unidos.
El cambio de las fábricas a Nueva Zelanda podría aumentar los costos de la producción, dijo el presidente ejecutivo de F&P Healthcare, Lewis Gradon.
"Los aranceles nunca son buenos", dijo Gradon en una entrevista telefónica con Reuters. "Tenemos dos plantas, una en Nueva Zelanda y otra en México, y tenemos la capacidad de abastecer a Estados Unidos desde Nueva Zelanda si eso tiene más sentido económico", agregó.
La Casa Blanca dijo el jueves que el gobierno de Trump podría financiar la construcción de un muro a lo largo de la frontera con México con un nuevo impuesto de 20 por ciento sobre los bienes procedentes desde México. embargo, la oficina del presidente de Estados Unidos más tarde dio marcha atrás, diciendo que no estaba respaldando el arancel y que la idea era simplemente un ejemplo de las vías existentes para lograr que México pague por el muro.
Fisher & Payne seguirá fabricando en México productos destinados a sus mercados no estadounidenses, dijo Gradon, que agregó que la firma podría beneficiarse de los costos de mano de obra más baratos de ese país debido a la caída del peso mexicano.
(1 dólar = 1,38 dólares neozelandeses) (Editado en español por Rodrigo Charme)