BOGOTÁ, 21 feb (Reuters) - Las Fuerzas Armadas de Colombia intensificaron el miércoles la seguridad para evitar una nueva ola de saqueos en Bogotá y otras ciudades del país después que 16 supermercados, supuestamente de propiedad de la antigua guerrilla de las FARC, fueron asaltados por cientos de personas que robaron comida y los destruyeron.
Los saqueos comenzaron después de que la Fiscalía General anunció el lunes la confiscación de una cadena de 60 supermercados que las izquierdistas Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) no declararon ni devolvieron como parte del acuerdo de paz con el Gobierno para acabar un conflicto de más de medio siglo que ha dejado 220.000 muertos.
Cientos de personas armadas con garrotes y piedras destruyeron las entradas y saquearon por completo los supermercados de Bogotá y otras ciudades de los departamentos de Cundinamarca, Tolima, Boyacá y Quindío. Las autoridades usaron gases lacrimógenos para dispersar las turbas.
"Estamos adoptando medidas, porque tenemos información de que hay grupos de personas que se están organizando por redes sociales para atacar otros establecimientos del comercio", dijo a periodistas el secretario de gobierno de Cundinamarca, Javier Beltrán.
Policías y soldados fuertemente armados apoyados con tanquetas vigilaban los supermercados saqueados y otros que permanecen cerrados desde que la Fiscalía General anunció la confiscación con fines de expropiación. La mayoría parece ser actos de vandalismo y robo, debido a que otros establecimientos comerciales resultaron afectados, dijeron fuentes policiales.
En pueblos como Melgar y Facatativá las autoridades locales declararon el toque de queda entre la noche del martes y la madrugada del miércoles para evitar saqueos. Veintiocho personas han sido capturadas en medio de los desordenes, informó la Policía Nacional.
Las FARC, convertidas ahora en el partido político Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común, calificaron como un "espectáculo mediático" el anunció de confiscación de los supermercados y de otros bienes valorados en unos 227 millones de dólares por parte de la Fiscalía General, al tiempo que negaron que les pertenecieran.
De acuerdo con fuentes de seguridad y del Gobierno, las FARC acumularon una enorme fortuna durante el conflicto producto del narcotráfico, el secuestro y la extorsión, que incluye efectivo, tierras, ganado, bienes inmuebles de lujo y empresas en Colombia y en otros países.
Los líderes de las FARC niegan estar ocultando fortunas y dicen que todo lo gastaron en el conflicto y lo restante lo devolverán en cumplimiento del acuerdo de paz. (Reporte de Luis Jaime Acosta; Editado por Ricardo Figueroa)