El consejero delegado de Boeing (NYSE:BA), Kelly Ortberg, ha anunciado hoy que el gigante aeroespacial aplicará permisos temporales que afectarán a un segmento sustancial de su plantilla ejecutiva estadounidense, así como a otros empleados. Esta decisión se produce después de que unos 30.000 maquinistas iniciaran una huelga el pasado viernes, que ha provocado el cese de la producción del 737 MAX y otros modelos de avión.
Se prevé que los ejecutivos, directivos y empleados estadounidenses afectados se tomen una semana libre cada cuatro semanas. Esta pauta se mantendrá mientras dure la huelga.
En solidaridad con los trabajadores afectados, Ortberg también ha anunciado que, junto con otros directivos de Boeing, sufrirá la correspondiente reducción salarial mientras dure la huelga. Esta medida refleja la respuesta de la empresa a los retos operativos que plantea el actual conflicto laboral.
La huelga, que comenzó el pasado viernes, ha tenido un impacto significativo en las operaciones de Boeing, en concreto la detención de la línea de producción de su popular avión 737 MAX. Los despidos y los recortes salariales forman parte de la estrategia de Boeing para gestionar las tensiones financieras y operativas causadas por la huelga.
A medida que se desarrolla la situación, la dirección de Boeing y los maquinistas en huelga aún tienen que llegar a un acuerdo que reanude las actividades normales de producción y ponga fin potencialmente a la necesidad de los despidos anunciados.
Reuters ha contribuido a este artículo.
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