Deutsche Bank informó de un notable aumento del posicionamiento en renta variable dentro del sector tecnológico, lo que refleja una tendencia de mayor actividad inversora en valores tecnológicos y de crecimiento de megacapitalización (MCG).
Según el análisis del banco, el posicionamiento de este sector ha aumentado considerablemente, a diferencia de otros sectores que han experimentado un movimiento más lateral.
La medida del banco del posicionamiento agregado de la renta variable sigue siendo elevada pero no extrema, con una puntuación z de 0,80, lo que la sitúa en el percentil 93. El posicionamiento de los inversores discrecionales se ha mostrado volátil esta semana, con una puntuación z de 0,76, por encima de la media y en el percentil 89. Las estrategias sistemáticas también han registrado movimientos, con una puntuación z de 0,80, por encima de la media.
Las estrategias sistemáticas también han experimentado un repunte, con una puntuación z de 0,98, impulsadas por un descenso de la volatilidad tanto en la renta variable como en la renta fija. En particular, la volatilidad de la renta fija se encuentra en su punto más bajo desde finales de 2021.
Se cree que el cambio en el sector tecnológico anticipa un modesto repunte del crecimiento de los beneficios, que contrasta con la desaceleración gradual observada en los tres últimos trimestres. Este optimismo se refleja en el posicionamiento de los valores MCG y Tech, lo que sugiere que los inversores están teniendo en cuenta las posibles mejoras de los beneficios.
Los flujos de fondos de renta variable se mantuvieron estables, con una entrada de 8.800 millones de USD, destacando el aumento de 13.000 millones de USD en Estados Unidos y el repunte de 5.600 millones de USD en China. Estas entradas se vieron parcialmente compensadas por las salidas en otras regiones.
Las entradas en renta fija también aumentaron, totalizando 10.500 millones de dólares, principalmente en fondos con grado de inversión (IG) y de banda ancha, aunque los fondos de deuda pública y de mercados emergentes (EM) experimentaron continuas salidas.
Además, las empresas del S&P 500 anunciaron más de 75.000 millones de dólares en recompras esta semana, lo que supone una de las mayores semanas de anuncios de recompras fuera de la temporada de resultados. Deutsche Bank prevé que las recompras brutas alcancen aproximadamente 1,3 billones de dólares el próximo año, aumentando a la par que los beneficios.
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