Los analistas de JPMorgan revisaron el martes su calificación de Viasat (VSAT), de Sobreponderar a Neutral, citando la aceleración de la amenaza de interrupción de la órbita terrestre baja (LEO).
Las acciones de VSAT cayeron alrededor de un 5% en las operaciones previas a la comercialización.
La semana pasada, United Airlines (UAL) anunció planes de transición de más de 1.000 aviones de línea principal a Starlink para la conectividad en vuelo (IFC). Se espera que la transición, que comenzará con pruebas el año que viene, afecte al servicio de Viasat, ya que la empresa proporciona actualmente capacidad de satélite a una parte de la flota de United.
La firma financiera calcula que Viasat podría perder entre 60 y 80 millones de dólares, es decir, entre un 1% y un 2% de sus ingresos previstos para el año fiscal 25, debido al cambio. Esta cifra se basa en el supuesto de que se verán afectados unos 500 aviones, tanto los que reciben directamente los servicios de Viasat como los que utilizan sistemas LiveTV/Thales que dependen de la capacidad de satélite de Viasat. Se prevé que el impacto total se materialice en el año natural 2027, a medida que expiren los contratos existentes de IFC.
A pesar de los recientes contratos con LOT Polish Airlines, Korean Air, Royal Jordanian Airlines e Icelandair, el cambio de United Airlines supone un riesgo potencial para la cuota de mercado a largo plazo de Viasat en los segmentos IFC y de movilidad en general.
"Aunque creemos que desplazar la cuota de mercado líder de VSAT en IFC comercial llevará probablemente algún tiempo y requerirá una ejecución significativa por parte de los competidores, es difícil apostar en contra de un Starlink bien posicionado a largo plazo, aunque afecte marginalmente a la cuota de nuevas ganancias/RFP", explicaron los analistas.
"Creemos que los temores competitivos son exagerados (a corto plazo), pero esperamos que la sobrecarga competitiva sobre las acciones sea difícil de disipar tras el anuncio de la semana pasada".
Esto, señala JPMorgan, podría marcar el comienzo de un cambio significativo hacia mayores ganancias de acciones en la órbita terrestre baja (LEO).
"En nuestra opinión, si las aerolíneas se decantan cada vez más por un proveedor/solución IFC único en sus respectivas flotas, el desplazamiento de los proveedores GEO heredados a la órbita baja terrestre podría producirse a un ritmo acelerado", señalan los analistas.
No obstante, el segmento de Defensa y Tecnología Avanzada de Viasat proporciona cierto apoyo de valoración, lo que lleva a JPMorgan a mantener una calificación Neutral a pesar de los retos.
Como reflejo de la reducción prevista de los ingresos por movilidad, JPMorgan también ha revisado su precio objetivo para Viasat, rebajándolo a 15 dólares desde los 29 dólares anteriores.
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