Los inversores en el Reino Unido experimentaron un descenso de las acciones el miércoles, al empezar a decaer el entusiasmo inicial provocado por las importantes medidas de estímulo de China. El FTSE 100, índice de referencia de las acciones de primer orden en el Reino Unido, registró un descenso del 0,3% a las 0715 GMT.
Este descenso se produjo tras la subida del 0,3% del martes, que había formado parte de un repunte del mercado mundial en respuesta al anuncio por parte de China de su mayor paquete de medidas de estímulo desde el inicio de la pandemia del COVID-19. La confianza de los inversores parecía desvanecerse.
El desvanecimiento de la confianza de los inversores pareció deberse a la preocupación por la idoneidad de las medidas propuestas por China para hacer frente a los retos económicos subyacentes del país y estimular un aumento duradero de la demanda industrial y de consumo. Ni siquiera las medidas del banco central chino, que redujo el miércoles el tipo de interés de sus préstamos a medio plazo, lograron reavivar el sentimiento positivo del mercado.
Los analistas de BCA Research destacaron las limitaciones de la política monetaria para impulsar el crecimiento de la economía china, y subrayaron la necesidad de estímulos fiscales para rejuvenecer la demanda interna.
El retroceso del mercado británico fue generalizado, con el sector de bebidas experimentando una caída cercana al 1%, liderando la tendencia bajista. Los sectores bancario y de seguros de vida también sintieron el impacto, cayendo ambos en torno al 0,8%. El índice del sector del petróleo y el gas retrocedió un 0,3%, influido por el descenso de los precios del crudo.
En cambio, los mineros industriales y los de metales preciosos siguieron aprovechando el impulso de la sesión anterior, con ganancias del 1% y el 0,7%, respectivamente. Esto se vio respaldado por las continuas subidas de los precios de materias primas como el cobre y el oro.
El índice de mediana capitalización, que refleja mejor las tendencias del mercado nacional, se mantuvo sin cambios, y las acciones financieras frenaron las posibles ganancias.
Entre los movimientos individuales de las empresas, cabe destacar la caída del 0,5% de las acciones del portal inmobiliario Rightmove, que rechazó una oferta de adquisición revisada de 8.100 millones de dólares del grupo australiano REA por considerarla poco atractiva. Además, las acciones del minorista DFS Furniture también cayeron un 0,5% tras el anuncio de un desplome del 65,7% en su beneficio anual.
Reuters ha contribuido a este artículo.
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