Por Carjuan Cruz
Investing.com - Los mercados se desploman ante la cercanía de la reunión de la Reserva Federal mañana y sus nuevos anuncios el miércoles, los cuales apuntan a reforzar una política monetaria que pasó rápidamente a ser mucho más agresiva. A estos temores se suman además el conflicto en Ucrania, y la posibilidad de un ataque de Rusia.
Los posibles aumentos de tasas de interés que comenzarán en marzo, se unirán a un tapering que ha reducido el entorno de alta liquidez que estuvo presente desde el 2020 y que favorecían las acciones altamente valoradas.
"Hasta que tengamos una mayor liquidación de activos de riesgo, la Fed simplemente no estará convencida de que aumentar las tasas de interés y reducir el tamaño de su balance en 2022 cause una recesión en lugar de un aterrizaje suave", indicó Nicholas Colas, director de la firma financiera DataTrek Research, según cita YahooFinance.
Desde noviembre, la Fed viene recortando la compra de bonos del Tesoro y de los títulos respaldados en hipoteca, y esta disminución de inyección se está haciendo sentir en este inicio de año.
“La Fed sacó el golpe, la liquidez se evaporó y el S&P rompió por debajo de su media móvil de 200 por primera vez desde el brote de Covid”, cita Bloomberg en reporte a Rich Ross, experto financiero de la Evercore (NYSE:EVR) ISI.
Poco después de media jornada de apertura del mercado, el Dow Jones baja 771 puntos o 2.25% y el Nasdaq pronuncia su trayectoria negativa, con una caída de 388 puntos o 2.82%, que ya califica como de corrección.
Minetras que el S&P 500 cae 112 puntos o 2.55%, hasta ahora arrastra una caída de 11% en las primeras semanas de enero, dirigiéndose también a un territorio de corrección, un comportamiento que no se veía hace nueve décadas.
Y, según Ross, hay posibilidades de que el S&P 500 caiga a los 3.800 puntos: “Hay una dramática erosión del contexto técnico, que se une a una inflación más alta, la política más estricta y la condición política y geopolítica más incierta en años”.
En efecto, la situación en Ucrania se suma a los efectos que alimentan la aversión al riesgo. Estados Unidos ordenó la salida de sus diplomáticos de este país, ante la acumulación de tropas rusas. Los temores ante un conflicto bélico también impactan a los mercados por sus posibles efectos en la recuperación económica global.