Ciudad de México, 15 may (.).- El Gobierno de México expresó este lunes sus “serias preocupaciones” por las pérdidas económicas que le están ocasionando las recientes inspecciones de carga en el cruce fronterizo Matamoros-Brownsville por parte de autoridades de Texas.
“Estas acciones están motivadas por una visión antimexicana que dista de la integración social, cultural y económica entre México y Texas”, señaló la Secretaría de Economía (SE) del Gobierno mexicano en un comunicado.
En los próximos días, este caso se someterá al Comité de Facilitación de Comercio del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), según adelantó la SE.
Según la Secretaría de Economía, las inspecciones comenzaron el pasado 8 de mayo, con el objetivo de “interrumpir el tráfico de migrantes en la frontera”, lo que considera “una atribución que no corresponde a gobiernos subnacionales”.
México es el principal socio comercial de Texas, ya que esta relación representa al año un promedio de 23.000 millones de dólares.
“Gracias al T-MEC, juntos hemos desarrollado cadenas de suministro en sectores estratégicos como el automotriz, el electrónico y el de hidrocarburos”, según la dependencia.
Además de “pérdidas millonarias tanto para empresas mexicanas como para estadounidenses”, la Secretaría de Economía mexicana ha denunciado las demoras, de entre ocho y 27 horas, que sufren para entrar los transportes de carga nacional Texas, lo que está afectando especialmente a los productos perecederos.
“En última instancia, son los consumidores estadounidenses quienes pagan los costos de estas políticas, por lo que a todos conviene restablecer la normalidad en la frontera”, advirtió.
La dependencia mexicana indicó que ha iniciado un “diálogo constructivo” con la Oficina del Representante Comercial de los Estados Unidos (USTR) a fin de encontrar una solución que, insistió, “es causado por una autoridad subnacional.
También apuntó que el pasado 12 de mayo hubo una comunicación a distancia entre el subsecretario de Comercio Exterior, Alejandro Encinas, y el representante de comercial adjunto de EE.UU., Jayme White.