por Patricia Guerrero Medina
Infosel, abril. 1.- La industria minera del país solicitará al gobierno de México incluir al sector como actividad esencial durante la emergencia sanitaria por la pandemia de coronavirus covid-19, para mantener sus actividades y reducir el impacto que tendría en otras industrias.
Detener la actividad minera afectaría gravemente a las industrias que requieren de minerales entre sus insumos, como construcción, química, médica, eléctrica, de telecomunicaciones, alimenticia y energética, entre otras, dijo en un comunicado dirigido a sus afiliados la Cámara Minera de México, la organización que representa los intereses de las principales compañías mineras con presencia en el país.
"Buscaremos presentar el caso de la industria minera ante el Consejo de Salubridad General [. . .] para que se incorpore de manera posterior al acuerdo como actividad esencial, o bien, sea contemplada como una actividad cuya suspensión pueda tener consecuencias irreversibles para su continuidad y en el caso particular del sector, para las comunidades mineras", agregó.
Otras afectaciones estarían relacionadas con la entrada en vigor del nuevo tratado comercial entre México, Estados Unidos y Canadá, conocido como T-MEC, por su significado en español; así como las exportaciones que se realizan, principalmente a territorio estadounidense.
El lunes, las autoridades federales decretaron emergencia sanitaria por causas de fuerza mayor para tratar de desacelerar la propagación del virus, lo que implicó el cese temporal de actividades de las industrias que no fueran consideradas esenciales para el país, entre ellos la minería.
La postura de Camimex fue respaldada por el Sindicato Nacional Democrático de Trabajadores Mineros, Metalúrgicos, Siderúrgicos y Conexos, una de las principales organizaciones gremiales del sector y que advirtió que el cese de operaciones afectaría a 2.6 millones de trabajadores directos e indirectos.
Para los mineros, el sector puede cumplir con todos los protocolos de seguridad e higiene requeridos por las autoridades; además que su desarrollo lejos de los grandes centros urbanos es una ventaja para reducir considerablemente las posibilidades de contagios.
Infosel, abril. 1.- La industria minera del país solicitará al gobierno de México incluir al sector como actividad esencial durante la emergencia sanitaria por la pandemia de coronavirus covid-19, para mantener sus actividades y reducir el impacto que tendría en otras industrias.
Detener la actividad minera afectaría gravemente a las industrias que requieren de minerales entre sus insumos, como construcción, química, médica, eléctrica, de telecomunicaciones, alimenticia y energética, entre otras, dijo en un comunicado dirigido a sus afiliados la Cámara Minera de México, la organización que representa los intereses de las principales compañías mineras con presencia en el país.
"Buscaremos presentar el caso de la industria minera ante el Consejo de Salubridad General [. . .] para que se incorpore de manera posterior al acuerdo como actividad esencial, o bien, sea contemplada como una actividad cuya suspensión pueda tener consecuencias irreversibles para su continuidad y en el caso particular del sector, para las comunidades mineras", agregó.
Otras afectaciones estarían relacionadas con la entrada en vigor del nuevo tratado comercial entre México, Estados Unidos y Canadá, conocido como T-MEC, por su significado en español; así como las exportaciones que se realizan, principalmente a territorio estadounidense.
El lunes, las autoridades federales decretaron emergencia sanitaria por causas de fuerza mayor para tratar de desacelerar la propagación del virus, lo que implicó el cese temporal de actividades de las industrias que no fueran consideradas esenciales para el país, entre ellos la minería.
La postura de Camimex fue respaldada por el Sindicato Nacional Democrático de Trabajadores Mineros, Metalúrgicos, Siderúrgicos y Conexos, una de las principales organizaciones gremiales del sector y que advirtió que el cese de operaciones afectaría a 2.6 millones de trabajadores directos e indirectos.
Para los mineros, el sector puede cumplir con todos los protocolos de seguridad e higiene requeridos por las autoridades; además que su desarrollo lejos de los grandes centros urbanos es una ventaja para reducir considerablemente las posibilidades de contagios.