por César Enrique Pérez Moreno
(Amplía con detalles adicionales a lo largo de la historia)
Infosel, febrero. 27.- Los esfuerzos realizados por la empresa estatal Petróleos Mexicanos para frenar el declive de casi tres lustros en su plataforma de producción de crudo y para reducir pérdidas operativas por conceptos como el robo de combustible no impidieron que tuviera un aumento de casi el doble de sus pérdidas netas el año pasado.
Pese a ello, el equipo directivo de la empresa dijo que no ve necesariamente un fracaso tras el desempeño observado en 2019 y, por el contrario, algunos aspectos operativos hacen pensar que puede enderezar el rumbo en los tres años que se planteó para regresar al equilibrio financiero.
Pemex informó que tuvo una pérdida neta de 346 mil 135 millones de pesos en 2019, lo que representa un incremento de 91.8% con respecto a las pérdidas observadas de 180 mil 420 millones del año previo.
"Cerramos uno de los años más complejos en la historia reciente de Petróleos Mexicanos", dijo la dirección de la empresa estatal, en el reporte trimestral que envió a la Bolsa Mexicana de Valores.
La dirección de la mayor empresa del país explicó que algunas las acciones acordadas el año pasado permitirán que se cumplan los compromisos establecidos en su plan de negocios para la administración actual.
"Es relevante mencionar que el efecto de todos estos cambios se observará de manera gradual en estados financieros de los próximos trimestres. Estamos convencidos de que los avances logrados a lo largo del año 2019 serán determinantes para una mejora gradual y constante de los indicadores operativos y financieros más relevantes de Petróleos Mexicanos", dijo la petrolera estatal. "Vale la pena recordar que en nuestro Plan de Negocios se estableció un periodo de transición de tres años. El primer año estuvo dedicado a resolver los problemas estructurales y sentar las bases de una nueva política de gestión operativa y financiera de Pemex. A partir de 2020, iremos consolidando estas iniciativas para alcanzar, en el año 2021, el equilibrio financiero de la empresa".
Los ingresos totales de la empresa cayeron 16.5% en 2019 frente al año previo, al pasar de un billón 681 mil 119 millones de pesos a un billón 403 mil 474 millones.
En términos operativos, la empresa reportó una utilidad de operación de 69 mil 851 millones de pesos en 2019, lo que representa una caída de 81% frente a los 367 mil 400 millones de 2018.
La petrolera dijo que en promedio logró un incremento de 0.04% mensual de su producción, con lo que cortó una racha de 14 años de caídas seguidas, algo que es visto como una buena noticia por parte del equipo directivo de la empresa, que tiene su sede en Ciudad de México.
"La inversión en exploración y producción en 2019 creció 13.6% en términos reales y, por primera vez en más de una década, Pemex no utilizó la deuda como fuente de financiamiento para cubrir su déficit financiero, ni para financiar los proyectos de inversión", dijo Alberto Velázquez, el director corporativo de finanzas de la petrolera estatal, en una conferencia de prensa con inversionistas.
"Es importante resaltar que en la industria petrolera estabilizar e incrementar la producción de hidrocarburos, implica primero compensar la declinación de los campos existentes y después ejecutar las acciones necesarias para lograr un incremento adicional", agregó Velázquez, en la llamada con inversionistas. "Tomando en cuenta todo esto, el esfuerzo de Pemex durante 2019 significa un incremento en la producción de más de 200 mil barriles diarios".
Además, destacó que logró reducir su endeudamiento en 99.1 mil millones de pesos gracias al apoyo financiero del gobierno de Andrés Manuel López Obrador.
"Asimismo, a la fecha se ha llevado a cabo el proceso de refinanciamiento más grande en la historia de la compañía, con un monto cercano a los 36 mil millones de dólares", dijo la compañía. "Se redujo el robo de combustibles a niveles de solo 5 miles de barriles diarios en promedio durante 2019".
Durante el último trimestre del año, Pemex tuvo una pérdida neta de 169 mil 768 millones de pesos, un flujo operativo de 11 mil 326 millones e ingresos totales de 320 mil 87 millones de pesos, lo que representa un avance de 7.9% en el primer caso y caídas de 88.9 y 21.7% frente al periodo de octubre a diciembre de 2018.
Finalmente, la petrolera reportó una pérdida operativa de 112 mil 197 millones de pesos que se compara negativamente con la utilidad de 86 mil 110 millones de pesos del cuarto trimestre de 2018.
Para algunos especialistas, Pemex corre el riesgo de ver un deterioro aún mayor si la directiva de la petrolera no se enfoca en los negocios que tienen mayor rentabilidad y abre la puerta a mayor interacción con la iniciativa privada.
La pérdida "es el resultado de cerrarle la puerta a las asociaciones, de enfocarse en malos campos, pequeños y sin productividad y pensar que solo es perforar a lo bestia", escribió Gonzalo Monroy, consultor en materia energética, en su cuenta personal de Twitter. "Para dar un poco de contexto, esta pérdida anual es casi la misma que tuvieron en 2014, cuándo el precio internacional del petróleo cayo de 110 dólares por barril a 35. En 2019, no hubo un desastre externo de ese tipo. Y mucha de la culpa viene por refinar en México".
(Amplía con detalles adicionales a lo largo de la historia)
Infosel, febrero. 27.- Los esfuerzos realizados por la empresa estatal Petróleos Mexicanos para frenar el declive de casi tres lustros en su plataforma de producción de crudo y para reducir pérdidas operativas por conceptos como el robo de combustible no impidieron que tuviera un aumento de casi el doble de sus pérdidas netas el año pasado.
Pese a ello, el equipo directivo de la empresa dijo que no ve necesariamente un fracaso tras el desempeño observado en 2019 y, por el contrario, algunos aspectos operativos hacen pensar que puede enderezar el rumbo en los tres años que se planteó para regresar al equilibrio financiero.
Pemex informó que tuvo una pérdida neta de 346 mil 135 millones de pesos en 2019, lo que representa un incremento de 91.8% con respecto a las pérdidas observadas de 180 mil 420 millones del año previo.
"Cerramos uno de los años más complejos en la historia reciente de Petróleos Mexicanos", dijo la dirección de la empresa estatal, en el reporte trimestral que envió a la Bolsa Mexicana de Valores.
La dirección de la mayor empresa del país explicó que algunas las acciones acordadas el año pasado permitirán que se cumplan los compromisos establecidos en su plan de negocios para la administración actual.
"Es relevante mencionar que el efecto de todos estos cambios se observará de manera gradual en estados financieros de los próximos trimestres. Estamos convencidos de que los avances logrados a lo largo del año 2019 serán determinantes para una mejora gradual y constante de los indicadores operativos y financieros más relevantes de Petróleos Mexicanos", dijo la petrolera estatal. "Vale la pena recordar que en nuestro Plan de Negocios se estableció un periodo de transición de tres años. El primer año estuvo dedicado a resolver los problemas estructurales y sentar las bases de una nueva política de gestión operativa y financiera de Pemex. A partir de 2020, iremos consolidando estas iniciativas para alcanzar, en el año 2021, el equilibrio financiero de la empresa".
Los ingresos totales de la empresa cayeron 16.5% en 2019 frente al año previo, al pasar de un billón 681 mil 119 millones de pesos a un billón 403 mil 474 millones.
En términos operativos, la empresa reportó una utilidad de operación de 69 mil 851 millones de pesos en 2019, lo que representa una caída de 81% frente a los 367 mil 400 millones de 2018.
La petrolera dijo que en promedio logró un incremento de 0.04% mensual de su producción, con lo que cortó una racha de 14 años de caídas seguidas, algo que es visto como una buena noticia por parte del equipo directivo de la empresa, que tiene su sede en Ciudad de México.
"La inversión en exploración y producción en 2019 creció 13.6% en términos reales y, por primera vez en más de una década, Pemex no utilizó la deuda como fuente de financiamiento para cubrir su déficit financiero, ni para financiar los proyectos de inversión", dijo Alberto Velázquez, el director corporativo de finanzas de la petrolera estatal, en una conferencia de prensa con inversionistas.
"Es importante resaltar que en la industria petrolera estabilizar e incrementar la producción de hidrocarburos, implica primero compensar la declinación de los campos existentes y después ejecutar las acciones necesarias para lograr un incremento adicional", agregó Velázquez, en la llamada con inversionistas. "Tomando en cuenta todo esto, el esfuerzo de Pemex durante 2019 significa un incremento en la producción de más de 200 mil barriles diarios".
Además, destacó que logró reducir su endeudamiento en 99.1 mil millones de pesos gracias al apoyo financiero del gobierno de Andrés Manuel López Obrador.
"Asimismo, a la fecha se ha llevado a cabo el proceso de refinanciamiento más grande en la historia de la compañía, con un monto cercano a los 36 mil millones de dólares", dijo la compañía. "Se redujo el robo de combustibles a niveles de solo 5 miles de barriles diarios en promedio durante 2019".
Durante el último trimestre del año, Pemex tuvo una pérdida neta de 169 mil 768 millones de pesos, un flujo operativo de 11 mil 326 millones e ingresos totales de 320 mil 87 millones de pesos, lo que representa un avance de 7.9% en el primer caso y caídas de 88.9 y 21.7% frente al periodo de octubre a diciembre de 2018.
Finalmente, la petrolera reportó una pérdida operativa de 112 mil 197 millones de pesos que se compara negativamente con la utilidad de 86 mil 110 millones de pesos del cuarto trimestre de 2018.
Para algunos especialistas, Pemex corre el riesgo de ver un deterioro aún mayor si la directiva de la petrolera no se enfoca en los negocios que tienen mayor rentabilidad y abre la puerta a mayor interacción con la iniciativa privada.
La pérdida "es el resultado de cerrarle la puerta a las asociaciones, de enfocarse en malos campos, pequeños y sin productividad y pensar que solo es perforar a lo bestia", escribió Gonzalo Monroy, consultor en materia energética, en su cuenta personal de Twitter. "Para dar un poco de contexto, esta pérdida anual es casi la misma que tuvieron en 2014, cuándo el precio internacional del petróleo cayo de 110 dólares por barril a 35. En 2019, no hubo un desastre externo de ese tipo. Y mucha de la culpa viene por refinar en México".