por Michelle del Campo
Infosel, abril. 14.- Sanofi (PA:SASY), una farmacéutica de origen francés, se unió a los esfuerzos de la británica GlaxoSmithKline (LON:GSK) para desarrollar una vacuna contra el SARS-CoV-2, el virus que provoca la enfermedad covid-19 que en la actualidad asola la salud y la economía mundial.
La firma francesa contribuirá con su antígeno proteína S del covid-19, que está basado en una tecnología de ADN recombinante, que ha sido utilizado por Sanofi en un producto licenciado para el tratamiento de la influenza en Estados Unidos; mientras que GSK integrará su tecnología adyuvante, que permite reducir la cantidad de proteína de vacuna requerida en cada dosis, dijeron las empresas, en un comunicado conjunto.
"Esta colaboración reúne a dos de las compañías de vacunas más grandes del mundo", dijo Emma Walmsley, directora ejecutiva de GSK, en el comunicado. "Al combinar nuestra experiencia científica, tecnologías y capacidades, creemos que podemos ayudar a acelerar el esfuerzo global para desarrollar una vacuna para proteger a tantas personas como sea posible de covid-19".
La fase uno de pruebas clínicas de esta vacuna podría iniciar en la segunda mitad de 2020 y de resultar exitosa, el producto estaría disponible un año después, a mediados de 2021.
GSK había anunciado ya a mediados de marzo sus esfuerzos para desarrollar la vacuna en colaboración con la Coalición para las Innovaciones en Preparación para Epidemias, una asociación pública y privada de investigación con sede en Noruega.
Otras empresas del ramo como Johnson & Johnson y Pfizer (NYSE:PFE) también trabajan en el desarrollo de una vacuna contra el virus que ha afectado a 1.8 millones de personas a nivel global y provocado la muerte de 117 mil 21 personas, de acuerdo con las cifras más recientes de la Organización Mundial de la Salud.
Infosel, abril. 14.- Sanofi (PA:SASY), una farmacéutica de origen francés, se unió a los esfuerzos de la británica GlaxoSmithKline (LON:GSK) para desarrollar una vacuna contra el SARS-CoV-2, el virus que provoca la enfermedad covid-19 que en la actualidad asola la salud y la economía mundial.
La firma francesa contribuirá con su antígeno proteína S del covid-19, que está basado en una tecnología de ADN recombinante, que ha sido utilizado por Sanofi en un producto licenciado para el tratamiento de la influenza en Estados Unidos; mientras que GSK integrará su tecnología adyuvante, que permite reducir la cantidad de proteína de vacuna requerida en cada dosis, dijeron las empresas, en un comunicado conjunto.
"Esta colaboración reúne a dos de las compañías de vacunas más grandes del mundo", dijo Emma Walmsley, directora ejecutiva de GSK, en el comunicado. "Al combinar nuestra experiencia científica, tecnologías y capacidades, creemos que podemos ayudar a acelerar el esfuerzo global para desarrollar una vacuna para proteger a tantas personas como sea posible de covid-19".
La fase uno de pruebas clínicas de esta vacuna podría iniciar en la segunda mitad de 2020 y de resultar exitosa, el producto estaría disponible un año después, a mediados de 2021.
GSK había anunciado ya a mediados de marzo sus esfuerzos para desarrollar la vacuna en colaboración con la Coalición para las Innovaciones en Preparación para Epidemias, una asociación pública y privada de investigación con sede en Noruega.
Otras empresas del ramo como Johnson & Johnson y Pfizer (NYSE:PFE) también trabajan en el desarrollo de una vacuna contra el virus que ha afectado a 1.8 millones de personas a nivel global y provocado la muerte de 117 mil 21 personas, de acuerdo con las cifras más recientes de la Organización Mundial de la Salud.