Las autoridades mexicanas disolvieron dos caravanas de migrantes en su camino hacia la frontera con EU, trasladando a algunos en autobús y ofreciendo documentos de tránsito a otros. Por Edgar H. Clemente
TAPACHULA, México (AP) — Las autoridades mexicanas disolvieron dos pequeñas caravanas de migrantes que se dirigían a la frontera con Estados Unidos, informaron activistas este sábado.
Algunos migrantes fueron trasladados en autobús a ciudades del sur de México y a otros les ofrecieron documentos para poder transitar.
Los hechos se registraron una semana después de que el presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, amenazara con imponer aranceles del 25 por ciento a los productos mexicanos a menos que México haga más para contener el flujo de migrantes hacia el norte.
El miércoles, Trump escribió que la presidenta mexicana, Claudia Sheinbaum, había acordado detener la migración no autorizada a través de la frontera hacia Estados Unidos. Sheinbaum escribió en sus cuentas de redes sociales el mismo día que "se atiende a las personas migrantes y a las caravanas antes de que lleguen a la frontera".
El activista de derechos de los migrantes, Luis García Villagrán, dijo que la disolución de las dos caravanas parecía ser parte del "acuerdo entre la presidenta de México y el presidente de los Estados Unidos".
La promesa de Donald Trump de deportar a millones de migrantes. Foto: Captura de pantalla La primera de las caravanas partió de la ciudad de Tapachula, en el sur de México, cerca de la frontera con Guatemala, el 5 de noviembre, el día en que Trump fue elegido. En su punto máximo llegó a tener unas dos mil 500 personas. En casi cuatro semanas de caminata, recorrió unos 430 kilómetros hasta Tehuantepec, en el estado de Oaxaca.
En Tehuantepec, funcionarios de migración mexicanos ofrecieron a los migrantes cansados viajes gratuitos en autobús a otras ciudades del sur o centro de México.
"Nos llevaron a Acapulco, a otros compañeros a Morelia y a otros compañeros a la ciudad de Oaxaca", dijo Bárbara Rodríguez, quien dejó su país natal, Venezuela, después de las controvertidas elecciones presidenciales de este año.Rodríguez dijo por teléfono que después tomó un autobús por su cuenta a Ciudad de México.
La segunda caravana, de unos mil 500 migrantes, partió el 20 de noviembre y recorrió unos 225 kilómetros hasta el pueblo de Tonalá, en el estado de Chiapas. Ahí, las autoridades ofrecieron una especie de visa de tránsito que permite viajar por México durante 20 días.
La columna estaba conformada por unas 2500 migrantes de diferentes nacionalidades. Foto: Damián Sánchez, Cuartoscuro Sheinbaum dijo que confía en que se pueda evitar una guerra arancelaria con Estados Unidos. Pero su declaración, el día después de que sostuvo una llamada telefónica con Trump, no dejó claro quién ofreció qué.
Aparte de las mucho más grandes caravanas de 2018 y 2019, a las cuales se les proporcionaron autobuses para recorrer parte del camino hacia el norte, ninguna ha llegado completa a la frontera de Estados Unidos caminando o haciendo autostop, aunque algunas personas lo han logrado solas.
Durante años, las caravanas de migrantes a menudo han sido bloqueadas, hostigadas o impedidas de hacer autostop por la policía mexicana y los agentes de migración. También han sido frecuentemente detenidas o devueltas a zonas cerca de la frontera con Guatemala.
INM RECHAZA ENGAÑAR A MIGRANTES
El Instituto Nacional de Migración (INM) rechazó las acusaciones de que engaña a las personas extranjeras de las caravanas que aceptan los traslados que ofrece la institución. Según un comunicado, el INM asegura que los migrantes que optan por el servicio de transporte lo hacen de manera voluntaria, buscando evitar los riesgos asociados a su tránsito.
El primer contacto que tienen los migrantes al abordar los autobuses del INM es con los Grupos Beta de Protección a Migrantes, quienes les brindan líquidos para hidratarse y la atención inmediata que requieran.
La institución ha destacado que no ha recibido reclamos por parte de las personas extranjeras que han aceptado el traslado, y que en ningún momento se les ha prometido algo que la institución no haya cumplido.
En el caso de niñas, niños, adolescentes y personas vulnerables, el INM canalizó su atención a la Procuraduría Federal de Protección de Niñas, Niños y Adolescentes, en cumplimiento con la Ley de Migración y priorizando el interés superior de la infancia y la unidad familiar.