BRASILIA, 21 ago (Reuters) - El Gobierno de Brasil no ve una salida a corto plazo para la crisis en Venezuela, pero envió de vuelta a Caracas a su embajador y va a reforzar la presencia diplomática en su vecino para tratar de mediar en un diálogo entre el presidente Nicolás Maduro y la oposición, dijeron a Reuters fuentes diplomáticas.
"Brasil tiene la capacidad de conversar con las dos partes. Otros países solamente hablan con la oposición", sostuvo un diplomático.
Ruy Nogueira, nombrado embajador durante el mandato de Dilma Rousseff, pasó varios meses en Brasil pero ahora volverá a Caracas. El funcionario tiene una buena relación con el Gobierno de Maduro y Brasilia cree que puede abrir un diálogo con su gente pese a la relación actual entre los dos países.
Hace tres semanas, el bloque comercial Mercosur activó la cláusula democrática contra Venezuela y la suspendió hasta que la situación política mejore. Pero más allá de este tipo de medidas, los diplomáticos brasileños no ven que se puedan tomar acciones más efectivas, como sanciones económicas.
"Es difícil sancionar a un país que se boicotea solo. Cualquier sanción generaría más problemas para la población venezolana, algo que Brasil no quiere", sostuvo un diplomático.
Brasil compra petróleo y vende alimentos a Venezuela. Cualquier sanción económica tendría un efecto inmediato en la población, algo que el Gobierno quiere evitar. (Reporte de Lisandra Paraguassu y Anthony Boadle. Editado en español por Javier Leira)