BUENOS AIRES, 5 mar (Reuters) - Organismos de derechos humanos internacionales condenaron el viernes lo que señalaron como el uso de fuerza indiscriminada de parte de fuerzas de seguridad de la provincia argentina de Formosa contra personas que manifestaban contra una decisión del distrito de endurecer restricciones por la pandemia de COVID-19.
Medios locales transmitieron el viernes imágenes en las que se ven a policías de Formosa disparar con balas de goma en medio de gases a personas que protestaban en la capital provincial homónima por la decisión de autoridades de limitar las actividades comerciales por un crecimiento de casos de COVID.
Formosa se encuentra en el norte de Argentina y es una de las provincias más pobres del país sudamericano, que a su vez hace años se encuentra en una recesión que en el 2020 fue agravada por los efectos de la pandemia.
Las acciones de las fuerzas de seguridad formoseñas fueron criticadas por la oficina regional del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ACNUDH), Jan Jarab, según un comunicado de ONU Argentina.
Jarab "expresa preocupación por los hechos de violencia ocurridos hoy en la ciudad de Formosa. De acuerdo a la información recibida, la respuesta de la policía (a la protesta) implicó el uso de violencia indiscriminada que resultó en personas heridas y detenidas", señaló el comunicado.
La Comisión Interamericana de Derechos Humanos dijo en su cuenta de Twitter que estaba preocupada tras recibir información que "efectivos de la policía habrían utilizado balines de goma, gases lacrimógenos y golpes contra manifestantes y periodistas".
Formosa es gobernada hace décadas por el peronista Gildo Insfrán.
Sin embargo, el Jefe de Gabinete de la coalición peronista que gobierna a Argentina, Santiago Cafiero, señaló en Twitter que "el Estado debe garantizar la libre expresión pacífica de la ciudadanía. En momentos de angustia colectiva, tiene que primar la serenidad. La violencia nunca es el camino. Y mucho menos la violencia institucional".
En Argentina se han registrado más de 2,14 millones de casos de personas que contrajeron el COVID-19, de los que 52.784 fallecieron. El país sudamericano posee una población de cerca de 45 millones de personas. (Reporte de Marta López y Maximilian Heath; Escrito por Maximilian Heath)