Por Pinchas Cohen
El bitcoin está en racha. Los inversores no parecen cansarse de la criptodivisa, que ha vuelto a dispararse una vez más elevando sus ganancias de este año hasta un 130%.
Este lunes sobrepasó el nivel de 2.200 USD, avanzando un 9% intradía y un 15% con respecto al precio de cierre del viernes pasado en los 1,913 USD, que suponían nuevos máximos históricos en ese momento. El bitcoin ha subido ya un 397% con respecto al año pasado.
Y no es sólo el precio del bitcoin el que está subiendo. Cada vez más empresas parecen dispuestas a asumir la exposición a esta volátil divisa digital. Para empezar, pronto podríamos poder utilizarlos incluso para comprar billetes de avión de la aerolínea japonesa Peach Aviation.
También se ha convertido en una divisa refugio seguro ante el riesgo político. Irónicamente, ahora su mayor grupo de compradores son los ciudadanos japoneses, los titulares de esa otra popular divisa refugio seguro, el yen. Y aquí tenemos otra ironía: de todas las agencias que tratan de frenar las irregularidades en torno al comercio y venta de bitcoin, los reguladores japoneses son unos de los más estrictos.
Sin embargo, las divisas virtuales —el Bitcoin está ahora mismo a la cabeza de la categoría— son quizá las que presentan un crecimiento más explosivo, tal y como Fortune ha indicado recientemente:
"Si hubieras comprado 5 USD en bitcoins hace siete años, ahora serías 4,4 millones de USD más rico".
¿Demasiado tarde para entrar ahora?
La peor sensación para un inversor es la de sentarse en el banquillo, mirando cómo otras personas obtienen beneficios. Éste podría ser el caso. O podría ser mejor esperar. ¿Qué hacer?
Ayer, el precio del bitcoin subió un 3,10%, con un avance intradía de un 18,57%, aunque la divisa cerró con un alza de “sólo” un 10,92%, en 2149,6299.
Un gap creciente indica que solo ha habido compradores, no vendedores. Los traders pueden interpretar eso como una señal alcista. Sin embargo, no todos los gaps crecientes son alcistas.
Un gap de zona que aparece en un rango de negociación no tiene importancia, pero un gap de agotamiento, como el que podría haberse formado ayer, que aparece después de un incremento extraordinario del precio, es realmente peligrosa. Refleja la exuberancia irracional del público (a veces se denomina “dinero tonto”), que sólo entra si oye buenas noticias, pero termina comprando sólo después de que el dinero inteligente y los traders profesionales ya hayan disfrutado del repunte.
El público desprevenido se une en la cima, justo antes del mencionado dinero inteligente —que ya ha disfrutado y se ha beneficiado de la locura de repunte— ya han entrado todos y simplemente esperan una buena oportunidad para posicionarse en largo, por lo que pueden deshacerse de todo con el siguiente comprador no tan inteligente.
Gap de agotamiento o próxima oportunidad de compra
El gap de agotamiento de ayer viene seguido hoy de lo que puede llegar a ser un ahorcado, un gráfico de velas que, con la consiguiente confirmación de un cierre en niveles más bajos, indica que los alcistas lo han dado todo y los bajistas toman el relevo. Esa psicología encajaría perfectamente con la psicología de la brecha de agotamiento.
Pero echemos un vistazo al gráfico de 30 minutos.
El precio alcanzó máximos en 2.297,9951 ayer a las 20:00 horas (CET), pero desde entonces ha sido incapaz de alcanzar máximos más altos, poniendo la tendencia en tela de juicio. La tendencia de la fuerza relativa del precio es bajista, ya que se está debilitando. Además, la estocástica muestra una sobreventa y un cruce a la baja, junto con una tendencias en general bajista, como el RSI (índice de fuerza relativa).
Incluso si usted confía en el futuro a largo plazo del bitcoin, puede esperar una reversión, tanto del precio como del impulso. Pero ya que mencionamos el más largo plazo, veamos un gráfico semanal de bitcoin.
¡Seis semanas consecutivas de ganancias! Tal vez deberíamos comprar todos bitcoins y verlo subir de valor, eternamente. Aunque estamos bromeando, seguir a la manada no siempre es necesariamente malo. Nos puede proteger de los depredadores.
Simplemente, no la siga durante una estampida. Espere una reversión. Decir que el RSI está sobrevendido es un eufemismo. Ha alcanzado máximos históricos. La estocástica está sobrevendida, amenazando con un cruce a la baja y un doble fondo. Este es el gráfico semanal, así que preparémonos para una gran reversión cuando ocurra.
¿Cuándo entramos? Bueno, eso depende de cada uno, pero puesto que el precio puede haber tocado techo, a nosotros nos preocuparía que explosionara. Nosotros no lo tocaríamos hasta que el precio volviera a su reciente línea de tendencia alcista registrada a finales de marzo, por lo menos, lo que lo situaría probablemente en 1.650 USD, el nivel de apoyo mínimo del bitcoin del 15 de mayo, cuando descendió un 6,72%.