El dólar continúa con presionado después de que la decisión del Fed ayer no otorgó razones de soporte para la moneda ante la falta de señales más hawkish sobre la perspectiva de alza de tasas este año, lo que se une a un entorno de mayor apetito al riesgo y de riesgo e incertidumbre política por la nueva administración en EE.UU. Por otro lado, los comentarios de algunos miembros de la administración que aseguran que el USD está “muy fuerte” y otros países influyen en sus monedas con fines competitivos también inducen dudas sobre su posible trayectoria en el corto plazo. Donald Trump dijo que Irán “ha sido notificado” por sus pruebas de misiles balísticos y criticó nuevamente el acuerdo nuclear con dicho país, aunque sin ofrecer detalles sobre que opciones podría considerar la administración.
También criticó un plan de aceptar refugiados desde Australia, pudiendo significar mayores tensiones con un aliado clave en la región. En otras noticias, el BoE mantuvo sus tasas de referencia y programas de compras de activos sin cambios, en línea con lo esperado, aunque con un sesgo menos acomodaticio al revisar al alza por segunda ocasión desde el Brexit sus pronósticos económicos y con mayor preocupación por la aceleración de la inflación debido a una mejoría en la actividad y la caída del GBP. Las cifras económicas fueron relativamente escasas. En Japón, la confianza del consumidor de enero se ubicó en 43.2pts, marginalmente mayor al mes previo en 43.1pts pero por debajo de lo esperado, y en la Eurozona los precios al productor de diciembre repuntaron 1.6%anual, significativamente mayor al 0.1% del mes anterior. Por último, la República Checa mantuvo su tasa de referencia sin cambios en 0.05%.
Las divisas emergentes registran ganancias generalizadas, con las más elevadas en el orden de 0.5-0.9% y hasta 1% en el KRW y distribuido en todas las regiones. Entre el G10 solo el GBP cae (-0.6%) a pesar de que el tono del BoE fue más hawkish y ajustó sus pronósticos en este sentido- Del lado contrario, el AUD gana 1.3% seguido del JPY con +0.8%. El EUR/USD se aprecia 0.3% a 1.0807, intentado un rompimiento del techo sicológico de 1.08.
El MXN extiende nuevamente las ganancias en este entorno, ganando 0.5% a 20.60 por dólar y alcanzando hasta 20.51 como mejor nivel intradía, con ganancias desde la sesión asiática. Este es el mejor nivel para la moneda en lo que va de este año a pesar de reportes que pudieran sugerir un mayor deterioro al ya observado en la relación entre México y EE.UU. Ayer el peso se apreció 0.6% al pasar de 20.83 a 20.71, con un desempeño positivo sobre todo en divisas de Latam (con el BRL, ARS, MXN y COP entre los cinco mejores de emergentes) y a pesar la ganancia del USD frente al G10 que se mantuvo tras la decisión del Fed, que en nuestra opinión mostró un sesgo ligeramente menos hawkish a lo esperado por algunos participantes. Si bien el Comité reconoció una mejoría en el sentimiento de consumidores y negocios desde la última decisión, creemos que no sugiere una preocupación importante por la inflación a pesar de una mayor confianza de que se dirigirá al objetivo de 2.0% en el mediano plazo.
Nos mantenemos sin posiciones en el USD/MXN, a la espera de entorno de operación más estable para evaluar nuevas posiciones. A pesar del rally del peso desde el 20 de enero pasado, continuamos escépticos del potencial de apreciación de la moneda. Sin embargo, no es posible descartar una extensión del movimiento a la zona de 20.50 como principal soporte técnico dado el momentum que ha mostrado en conjunto con la debilidad reciente del dólar, con la decisión del Fed sin ofrecer muchos argumentos a favor de un repunte de este último en los próximos días. Sin embargo, consideramos que las noticias desde el frente externo no han sido del todo favorables, sobre todo en lo que se refiere a las crecientes tensiones sobre la relación de México con EE.UU. En este sentido, notamos que las acciones de Trump han iniciado con rapidez y han sido agresivas y consistentes con sus promesas de campaña, a pesar de señales mixtas sobre un tono más conciliador.
Creemos que esto ha ayudado a reducir parte del nerviosismo del mercado e inducido el cierre de posiciones especulativas largas en dólares, apoyando la baja del spot. Del lado local, pensamos que el efecto negativo de la incertidumbre no se ha disipado y se observará en las cifras de actividad económica en los próximos meses (como sugieren los indicadores del IMEF), mientras que la inflación se ha elevado fuertemente y podría continuar con su tendencia al alza (en espera del anuncio sobre un nuevo ajuste a los precios de la gasolina el viernes. No obstante, los últimos reportes aseguran que se intentará “suavizar” el cambio, sin descartar que los precios se mantengan constantes a través de una menor recaudación de IEPS). En este contexto, seguimos creyendo muy poco probable que rompa el sicológico de 20.00 a la baja incluso en un escenario positivo en el que se mantuviera el statu quo en la relación entre México y EE.UU., y que con base en las recientes noticias, consideramos como un escenario cada vez menos probable. Estas condiciones nos sugieren la conveniencia de aprovechar momentos de fortaleza del peso para compras de dólares, en particular en un horizonte de inversión de mediano plazo.