El peso cerró la sesión cotizando alrededor de 19.50 pesos por dólar, mostrando una depreciación de 1.20% o 23.2 centavos, tocando un mínimo de 19.2699 y un máximo 19.5342 pesos por dólar. La depreciación del peso se debe a:
1. El fortalecimiento generalizado del dólar estadounidense de 0.40%, de acuerdo con el índice ponderado, debido a que el mercado se mantiene a la espera de los comentarios del presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, mañana viernes en el simposio de banqueros centrales en Jackson Hole, Wyoming. Se espera que Powell pueda dar más claridad sobre la trayectoria que podría tomar la tasa de interés en los siguientes meses, ya que el mercado laboral se ha deteriorado.
2. La publicación de la inflación de México que se ubicó en -0.03% quincenal en la primera quincena de agosto, después de registrar 0.14% en la segunda quincena de julio. A tasa anual, la inflación se ubicó en 5.16%, siendo la menor desde la primera quincena de junio de este año (4.78%). Lo anterior presionó al alza al tipo de cambio, pues se espera que el Banco de México siga recortando este año la tasa de interés.
Hay que mencionar que en la sesión se publicaron las minutas de política monetaria del Banco de México en donde destaca, que los 3 miembros que votaron por un recorte, dejan sobre la mesa la posibilidad de discutir recortes adicionales. Bajo este contexto y con el dato más reciente de inflación es probable que se recorte nuevamente la tasa de interés el 26 de septiembre.
En la discusión de los miembros de la Junta de Gobierno, destaca que tres de ellos siguen viendo una tendencia a la baja de la inflación subyacente y que la desaceleración económica puede llevar a que se logre el objetivo de inflación del 3 %. Sin embargo, hubo dos opiniones disidentes, en donde por un lado Jonathan Heath destacó la falta de credibilidad en el pronóstico de inflación del Banco de México y que debe abandonarse la expectativa en donde la inflación alcanza la meta inflacionaria del 3% en 8 trimestres. Por su parte, Irene Espinosa destacó que el panorama sigue siendo muy complejo, pues la inflación general ha aumentado por un repunte del componente no subyacente más intenso y duradero de lo previsto.
3. La publicación de la declaración del embajador de Estados Unidos en México, Ken Salazar, en referencia a la propuesta de Reforma del Poder Judicial de México en donde destacó que cree que con base en su experiencia “la elección popular directa de jueces es un gran riesgo para el funcionamiento de la democracia en México”. Asimismo, mencionó que una reforma judicial debe contar con las salvaguardas adecuadas que aseguren que el poder judicial se fortalezca y no esté sujeto a la corrupción de la política. Por lo anterior, cree que “el debate sobre la elección directa de jueces en estos momentos, …, amenaza la relación comercial histórica que hemos construido, que se basa en la confianza de los inversionistas en el marco legal de México”.
Cabe mencionar que, en su conferencia de prensa la presidenta electa, Claudia Sheinbaum, explicó cómo va a funcionar la elección popular de jueces, ministros y magistrados, negando que vaya a ser solo por sorteo y destacó que el nuevo proceso garantiza la transparencia. Explicó que un comité evaluará a los postulados, quienes mandarán cartas de motivación y de referencia de sus profesores y vecinos, antes de que se elijan los finalistas para las votaciones. Asimismo, mencionó que las elecciones para el Poder Judicial costarán 5 mil millones de pesos y que el dinero saldrá de los fideicomisos.
Asimismo, mencionó que la reforma electoral no busca que el INE pierda autonomía, sino que haya cambio en el tema de financiamientos y el uso de propagandas.
En Banco Base estimamos que la reforma al Poder Judicial podría tener un costo sobre México de al menos 1.9% del PIB, por el freno en la llegada de nuevas inversiones y el freno de reinversión de utilidades de las empresas extranjeras que están en México. A esto se sumaría el efecto dominó sobre otras empresas, mexicanas y extranjeras, que enfrentarían una menor demanda de sus productos.
De acuerdo a la Secretaría de Economía hay anuncios de nuevas inversiones (IED) por 45,464 mdd, de los cuales el 48% son de empresas estadounidenses. El monto de anuncios de nuevas inversiones representa 125% de la inversión extranjera directa total del 2023 y 2.55% del PIB de México del mismo año.
Debido a que la reforma del Poder Judicial debilitaría el marco legal mexicano, la administración de justicia y la aplicación de las reglas del T-MEC en el país, se pone en riesgo la relación comercial con EEUU y se inhibirían las nuevas inversiones provenientes de ese país. Al freno de llegada de nuevas inversiones, se sumaría el freno en la reinversión de utilidades, pues 40% provienen de empresas estadounidenses.
En este sentido, la aprobación de la reforma podría deteriorar rápidamente el ambiente para hacer negocios y llevar a la economía mexicana hacia una recesión, tal como sucedió en 2019, tras la cancelación de la construcción del aeropuerto de la Cd. de México.
En el resto del mercado cambiario la fortaleza del dólar estadounidense llevó a la mayoría de las divisas a perder terreno, siendo las más depreciadas: el real brasileño con 1.72%, el peso mexicano con 1.20%, el rand sudafricano con 1.06%, la corona noruega con 0.91%, el peso colombiano con 0.85%, el yen japonés con 0.79%, la rupia de Indonesia con 0.74%, el won surcoreano con 0.70% y el florín húngaro con 0.63%. Por el contrario, las divisas más apreciadas fueron: el ringgit de Malasia con 0.02%, el shekel israelí con 0.01% y el rublo ruso con 0.01%.
En el mercado de commodities, el WTI cerró la sesión cotizando en 72.93 dólares por barril, ganando 1.33%, luego de tocar un mínimo de 71.46 dólares por barril durante la sesión anterior. Cabe recordar que el precio del petróleo ha sido presionado a la baja ante los riesgos de una menor demanda especialmente de China y Estados Unidos y ante una menor aversión al riesgo en el Medio Oriente, ya se está negociando un alto al fuego en Gaza.
Por su parte, el gas natural perdió 5.33% y cerró la sesión cotizando en 2.061 dólares por millón de BTU, ya que los inventarios en Estados Unidos aumentaron en 3.299 billones de pies cúbicos en la semana que finalizó el 16 de agosto. Los inventarios se encuentran en 369 mil millones de pies cúbicos por encima del promedio móvil de 5 años.
El mercado de capitales cerró la sesión con resultados mixtos entre los principales índices bursátiles. En Estados Unidos se observaron pérdidas fuertes debido al nerviosismo por parte del mercado sobre la expectativa de que Jerome Powell hará comentarios restrictivos el día de mañana en el simposio de Jackson Hole. El Dow Jones registró una pérdida de 0.43%, la mayor para una sesión desde el 7 de agosto. El Nasdaq Composite mostró una caída de 1.67%, cayendo por segunda ocasión de las últimas 11 sesiones. Por su parte, el S&P 500 cayó 0.89%, la mayor pérdida para una sesión desde el 5 de agosto. Al interior, destacaron las pérdidas de los sectores: tecnologías de la información (-2.13%), consumo discrecional (-1.87%) y servicios de comunicación (-0.92%).
En Europa, el STOXX 600 registró una ganancia de 0.35%, ganando en 7 de las últimas 8 sesiones y cerrando en su mayor nivel desde el 31 de julio. El DAX alemán mostró un avance de 0.24%, ganando en 12 de las últimas 13 sesiones. Por su parte, el FTSE 100 de Londres ganó ligeramente 0.06%. En México, el IPC de la BMV cerró con una pérdida de 1.02%, ligando 3 sesiones de pérdidas. Al interior, 25 de las 35 emisoras registraron pérdidas, resaltando: Banorte (BMV:GFNORTEO) (-4.06%), Grupo México (BMV:GMEXICOB) (-1.57%), Walmex (BMV:WALMEX) (-1.62%), Liverpool (-7.49%), Industrias Peñoles (BMV:PEOLES) (-3.32%), Arca Continental (ETR:CONG) (-1.52%) y Alfa (BMV:ALFAA) (-2.69%).
En la sesión, el euro tocó un mínimo de 1.1098 y un máximo de 1.1164 dólares por euro. La libra tocó un mínimo de 1.3077 y un máximo de 1.3129 dólares por libra. Por su parte, el tipo de cambio del euro con el peso tocó un mínimo de 21.4767 y un máximo de 21.7082 pesos por euro.