El peso mexicano intenta romper la racha de cuatro sesiones consecutivas negativas y por momentos se aprecia hacia $19.22 spot, después de que un funcionario del Banco de Japón lanzara un mensaje 'dovish' a los inversionistas advirtiendo que en el corto plazo no llevarán a cabo subidas de tasas de interés por la inestabilidad de los mercados y que seguirán con la flexibilización monetaria. Al ser la política monetaria del país asiático uno de los principales elementos coyunturales de las caídas recientes en los activos financieros, estos comentarios contribuyen a que recorten pérdidas. Por el resto del día, el tipo de cambio podría fluctuar entre los $19.10 y $19.40 spot (el euro entre $1.088 y $1.094).
El mercado financiero trata de reconducirse progresivamente en un entorno de volatilidad.
Japón se ha convertido en una importante fuente de preocupación para muchos inversionistas mundiales. La acción del Banco de Japón de la semana pasada de subir la tasa obligó a los operadores a abandonar las estrategias basadas en la visión de que la divisa nipona se mantendría débil y las tasas de interés no subirían demasiado rápido. El repunte del yen también desbarató una de las estrategias de mercado más rentables de este año, el carry trade, que consiste en tomar prestada la moneda japonesa para invertir en otros activos mundiales.
En este sentido, el Banco de Japón intenta calmar al mercado al sugerir una pausa en la subida de las tasas de interés.
El vicegobernador del Banco de Japón (BoJ), Shinichi Uchida, ha comentado que como están observando una fuerte volatilidad en los mercados financieros nacionales e internacionales, es necesario mantener los niveles actuales de flexibilización monetaria por el momento. Asimismo, declaró que no aumentarán las tasas de interés cuando los mercados financieros sean inestables.
Sus palabras han sido muy bien recibidas por el mercado y han provocado una caída del yen superior al 1.5%, lo que ayuda a que la mayoría de las monedas de economías emergentes recorten pérdidas.
Además, el otro elemento de incertidumbre que tiene que ver con la salud de la economía estadounidense parece contenerse por el momento, aunque las cifras en esta semana han sido escasas. Solo destacó la del lunes del ISM de servicios, cuyo resultado coincide con nuestra visión de una economía en transición hacia crecimientos económicos modestos en lugar de una al borde del colapso.
Por otro lado, la virtual candidata demócrata a la presidencia de EUA, Kamala Harris ha elegido como vicepresidente al Gobernador de Minesota, Tim Walz, que podría ayudarle a seguir avanzando en las encuestas. Harris ha logrado cerrar la brecha con Trump, y abre nuevamente la posibilidad de que los demócratas controlen la Cámara de representantes.
En China, durante julio las exportaciones e importaciones aumentaron, pero mientras las primeras crecieron menos de lo previsto, las segundas sorprendieron al alza, marcando el mejor desempeño en tres meses.
Por su parte, en Alemania, las exportaciones de junio cayeron 3.4%, por encima de la bajada esperada del 1.5%, mientras las importaciones subieron un 0.3%, muy por debajo del ascenso del 2.8% pronosticado.
Con relación a los commodities, la referencia WTI del precio internacional del petróleo sube cerca de 2.30% a 74.90 dólares por barril, con los operadores pendientes de un posible ataque inminente de Irán a Israel, según ha alertado el Gobierno estadounidense, que intenta rebajar la tensión en Oriente Medio.
Las principales bolsas en el mundo operan con resultados positivos, en la mayoría de los casos intentando recuperar la senda alcista después de las fuertes caídas de los últimos días.