Las expectativas del sector privado para este 2017 se siguen deteriorando. En la encuesta publicada hoy, referente al mes de enero, el crecimiento económico esperado para este año se redujo a 1.49% comparado con 1.6% en diciembre. Asimismo, se redujo el pronóstico de crecimiento para el 2018 de 2.28% a 2.17%.
A su vez, también sufrió una fuerte revisión los pronósticos para la inflación. Luego de conocerse la inflación para la primera quincena de enero, el consenso del mercado es que la inflación general se sitúe este año en 5.25%, sustancialmente por encima de la tasa de 4.13% que se pronosticaba apenas en diciembre. Para el 2018, la expectativa es que la inflación se reconduzca hacia su objetivo y vuelva a situarse por debajo del techo del rango objetivo de Banxico, que es de 4.0%. Su pronóstico para el año que viene es de 3.85%, si bien también se ha revisado al alza respecto a diciembre (3.59%).
La inflación subyacente, que excluye alimentos frescos y energía y que no sintió el efecto directo del gasolinazo, también se revisó al alza. Ahora se espera que suba este año un 4.19% comparado con 3.88% en diciembre.
Resultado de esas mayores presiones de precios, consecuencia del gasolinazo y de la depreciación del peso, el mercado también reacomodó sus expectativas para la tasa de fondeo. Al cierre de este año, prevé que la tasa de fondeo se ubique, en promedio, en 7.06% comparado con 6.46% en diciembre. La mediana se ubica en 7.0% comparado con 6.5% en el mes previo.
Ahora bien: frente a ese deterioro general, la mejor noticia parece ser que los analistas consideran que lo peor ya ha sido descontado por el peso mexicano. Los analistas prevén que al cierre del año el peso mexicano se ubique en 21.70 pesos por dólar. Aunque también es un nivel más elevado de los pronosticado en diciembre (21.21 pesos), no está demasiado lejos y se ubica por debajo de los 22 pesos. Para el 2018 se estiman niveles muy parecidos, en torno a 21.55 pesos.
Sea como sea, el cuadro general no es bueno: el crecimiento económico se verá dañado como resultado de una política fiscal restrictiva, una tasas de interés más altas de lo inicialmente esperado como resultado de un mayor repunte inflacionario y la incertidumbre que aún persiste con las políticas de Donald Trump.
El mercado mexicano no fue indiferente a la encuesta: la bolsa mexicana, que abrió al alza y tocó un máximo intradía de 47,225.23 pts, o una ganancia de 0.5%, se desinfló con los números de la encuesta. En el momento de escribir esta nota, el IPyC cae un 0.4%, en tanto Wall Street cotiza mixto. Dentro del IPyC, destacan las caídas de OHL México (MX:OHLMEX) (-2.5%) y de ASUR (-2.0%). El peso mexicano se aprecia un 0.3% a 20.77 pesos.
En otras bolsas de Latinoamérica, el Bovespa de Sao Paulo gana un 0.6%, y el Merval de Argentina otro 0.6%, la bolsa de Perú un 0.3% y la de Chile un 0.2%.