Wall Street se va para abajo. Y así andan casi todos los mercados del mundo. El tema de Grecia pesa, y muestra de ello es que el Dax de Fráncfort ha entrado en fase de corrección, lo que quiere decir que ha descendido más de un 10% respecto a su reciente máximo históricos. En contraste, el Shanghai Composite trepó a un máximo de siete años.
También aún nueve al mercado el dato de empleo de Estados Unidos del pasado viernes, lo que ha fortalecido de nuevo al dólar y ha presionado a las tasas globales al alza. Al parecer, el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, se quejó de la apreciación del dólar en la reunión del G-7 del fin de semana, algo que está dañando a la economía estadounidense. Pero un alto funcionario de la administración estadounidense negó dichos rumores. De lo que Obama se quejó es de la debilidad de la demanda global e instó a otros países a recurrir a medidas de política económica para robustecer su crecimiento.
Pero eso sí, la percepción de que la Fed, en algún momento de este año, tendrá que subir las tasas de interés hace mella en los mercados. El S&P’s ha descendido en las dos últimas semanas, y prolonga esa tendencia este lunes. Aun así, Wall Street está aún cerca de sus máximos históricos tocados a finales de mayo. La mezcla de unas bolsas caras y un escenario de tasas más adversos es lo que hace que los inversionistas se mantengan cautelosos. Hoy no se publicaron datos relevantes en Estados Unidos.
En el momento de escribir esta nota, el Dow Jones pierde un 0.3% y cotiza cerca de los 17,800 pts, el Nasdaq un 0.9% y se negocia en 5,025 pts en tanto el S&P’s 500 cae 0.5% a 2,083 pts.
En Europa, las cosas tampoco van bien. El discurso del primer ministro griego Alexis Tsipras en el parlamento heleno el pasado viernes ha irritado a los líderes europeos. El G-7, el fin de semana, instó a que se limaran las diferencias. Pero ni siquiera se sabe qué plan debe usarse de base para las negociaciones: si el presentado por los acreedores, el cual fue tachado por “ridículo y absurdo” por el gobierno griego, o el presentado por la administración de Tsipras.
En Alemania, el Dax de Francfor perdió un 1.2% y ya ha bajado más de un 10% desde su máximo de abril, por lo que el índice está en corrección. La bolsa de Atenas se hundió un 2.7%, el IBEX 35 de Madrid un 1.3% y la bolsa de Milán un 0.9%. De este modo, las bolsas europeas encadenan cinco jornadas consecutivas de retrocesos, la peor racha de este 2015.