Moderna (MX:MRNA) (NASDAQ:MRNA), uno de los valores favoritos de este año, ha perdido parte de su encanto. Sus acciones se encuentran ahora sometidas a una gran presión, ya que muchos analistas advierten de que el repunte del fabricante de vacunas contra el COVID ha ido demasiado lejos.
Tras alcanzar los 493,76 dólares a principios de agosto, sus acciones han perdido más de un 20% de su valor en las últimas dos semanas. Las acciones cerraron ayer en 400,30 dólares, lo que impulsa la valoración de la empresa de Massachusetts hasta casi 160.000 millones de dólares.
Esta valoración sitúa a Moderna en la misma liga que gigantes farmacéuticos mundiales como Bristol-Myers Squibb (NYSE:BMY), GlaxoSmithKline (LON:GSK), así como la cadena de farmacias minoristas CVS Health (NYSE:CVS).
Una consideración importante para los inversores en este momento es: ¿Deberían comprar Moderna ahora, dado el reciente retroceso?
La respuesta a esta pregunta depende en gran medida del rumbo que tome la crisis sanitaria mundial y del éxito que tenga la empresa a la hora de ir más allá de las vacunas y aprovechar todo el potencial de la tecnología ARNm, en la que se basa su vacuna COVID, como remedio para otras enfermedades. Por el momento, muchos analistas creen que el actual repunte de Moderna ha llegado a su fin.
Las de Moderna encabezan la lista de acciones del S&P 500 que los analistas prevén que van a hacer más este año, según un análisis de CNBC.com.
En una nota reciente, un analista de Oppenheimer (NYSE:OPY) explica:
"Nos sigue gustando la historia subyacente del ARNm, la tecnología y la ejecución de la gestión. Sin embargo, la creciente valoración ha superado nuestras expectativas actuales sobre la amplitud y profundidad de esta prometedora historia”.
Más avances
Más allá de la pandemia de COVID-19, los directivos de Moderna son optimistas en cuanto a que su tecnología permitirá curar otras enfermedades infecciosas respiratorias, como el virus sincitial respiratorio (VSR) y el citomegalovirus (CMV), así como otras posibles terapias para dolencias como el cáncer y las enfermedades inflamatorias.
Puede que apostar por otros avances no reporte beneficios tan rápidos como los generados por la autorización de emergencia de las vacunas contra el COVID. La mayoría de las vacunas experimentales de Moderna siguen en fase de pruebas con humanos, excepto su vacuna contra el citomegalovirus. Ésta podría convertirse en un producto multimillonario si funciona. Moderna también tiene previsto realizar pruebas con humanos este año con una vacuna contra el virus de Epstein-Barr, causante de la mononucleosis.
Los beneficios del segundo trimestre que Moderna ha anunciado este mes superaron las expectativas de Wall Street; las ventas de la vacuna contra el COVID-19 ascendieron a unos 6.000 millones de dólares en la primera mitad del año. Ya ha firmado 12.000 millones de dólares en acuerdos de compra anticipada —y otros 8.000 millones de dólares en opciones— para su vacuna contra el coronavirus el año que viene.
Oppenheimer y algunos analistas creen que estas previsiones de ventas ya se han reflejado en el precio de las acciones y no tiene sentido esperar más ganancias. Geoff Meacham, director gerente de BofA Securities, ha dicho en una nota reciente que Moderna necesitaría una probabilidad de éxito del 100% para toda su cartera de productos para justificar su subida.
En un informe del Wall Street Journal, Meacham explica: "Todo el mundo cree que todo lo que está en curso será similar al COVID y que se puede conseguir en unos pocos años. Creo que el COVID ha sido, con mucho, una situación única en la que han tenido un éxito aplastante".
Según las estimaciones publicadas en Investing.com, los analistas se muestran partidarios de futuras subidas. De 17 analistas encuestados, siete recomiendan comprar las acciones, mientras que el mismo número de pronosticadores se muestran neutrales. El precio objetivo estimado a 12 meses muestra otra caída del 27% frente al valor actual de las acciones.
Fuente: Investing.com
Moderna cotizaba el jueves a casi 49 veces sus ganancias de los últimos 12 meses, frente a las casi 27 veces de las ganancias del S&P 500.
Oppenheimer añadió en su nota:
"Observamos que, a medida que avanza la cartera de productos de ARNm, especialmente en otras modalidades, podríamos volver a ser constructivos. Por el momento, observaremos el desarrollo de este sueño desde la barrera".
Conclusión
Las últimas declaraciones de los analistas de Wall Street sugieren que Moderna ya ha alcanzado su máxima valoración en el ciclo actual y que las futuras ganancias dependen en gran medida de algunas incógnitas, como el rumbo que tome la pandemia o el éxito de sus otros medicamentos.